Actualmente, en el mercado de Puerto La Cruz y sus adyacencias se pueden observar comerciantes formales e informales canjeando divisas aun cuando no está legalmente permitido.
Usualmente, los usuarios recurren a estas personas para vender sus dólares y poder obtener el tan anhelado dinero en efectivo para realizar sus compras a menor precio.
Sin embargo, esto del cambio de divisas no es una tarea sencilla, pues a los vendedores no les gusta recibir billetes rotos, manchados o viejos.
En extrañas ocasiones, hay quienes los reciben con algún imperfecto, pero son más las veces que no los quieren aceptar.
El señor Jorge, comerciante, alega que exigen esta serie de requisitos porque luego los propios compradores no se los reciben a la hora de hacer un canje. “Es como un círculo vicioso. Si tú no los aceptas, yo tampoco”, agrega.
Otros vendedores afirman que no aceptan los dólares con imperfecciones porque como se trata de una moneda extranjera no pueden acudir a las entidades bancarias de Venezuela para depositarlos y cambiarlos por un billete en mejor estado.
Por lo tanto, para su fácil comercialización, aseguran los comerciantes, debe existir este tipo de limitaciones.
Puerto
La Cruz / Andrea Aroca