Tener agua potable en la zona alta, parroquia Santa Inés, de Cumaná, es un lujo. Incluso hay familias que tienen años que no ven salir el líquido por las tuberías de sus viviendas.
Son más de 1.000 familias las que padecen este problema y al parecer la causa radica en el deterioro del tanque del sector Antillano, que no se cargó completamente y no logra abastecer esta área.
Se conoció, según los vecinos, que la sequía ya lleva unos 10 años, tiempo en el cual la Hidrológica del Caribe (Hidrocaribe) raciona el agua.
José Deyan, habitante, dijo que el líquido llega con deficiencia a algunas comunidades y en otras no, pero el tiempo que es colocada no rinde para nada.
“En la avenida Badaraco Bermúdez la ponen en la mañana, cerca de 4 horas al día; y en otras zonas solo 30 minutos, pero hay familias que no gozan de este beneficio a ninguna hora”.
Se conoció que en la parte de Vallecito, que es lo más alto de esta zona, no llega nunca desde hace años.
“Esto nos obliga a buscar de dónde cargar agua e incluso comprarla, lo que genera un gasto adicional para nosotros”.
Por su parte Gabriel Machado, dijo que a diario las personas bajan con sus carretillas y envases para cargar agua hasta sus casas, lo que se ha vuelto “una esclavitud”.
Pide a las autoridades que les brinden una pronta solución, para mejorar su calidad de vida. “Hay muchas personas mayores que no tienen ayuda y no pueden cargar el líquido”.
Cumaná / GL - Corresponsalía