Trabajadores de emergencias luchaban el miércoles por llegar a poblaciones costeras aisladas tras el paso del huracán Willa y, debido a la lluvia provocada por la tormenta, personas seguían siendo desalojadas por temor a las inundaciones, a pesar de que la tormenta se disipaba sobre el norte de México.
De inmediato no hubo informes de muertes, pero los vientos de 195 kph (120 mph) de la tormenta cortaron la electricidad y dañaron edificios en el municipio de Escuinapa, Sinaloa, y la prensa local publicó imágenes de un hospital dañado.
El alcalde Hugo Moreno dijo que los rescatistas aún trataban de comunicarse con poblaciones costeras.
En el estado vecino de Nayarit, el gobernador Antonio Echavarría pidió al gobierno federal un helicóptero, botes, equipos de rescate y dijo que se intenta evacuar a personas de poblaciones bajo riesgo de inundaciones.
Antes de llegar a territorio continental cerca de Isla del Bosque el martes en la noche, la tormenta azotó las Islas Marías, un archipiélago situado a unos 100 kilómetros (60 millas) de la costa que tiene una reserva natural y una prisión federal. Las autoridades declinaron explicar las medidas de seguridad que se tomaron en el penal citando motivos de seguridad, pero señalaron que su prioridad era la seguridad e integridad de las personas.
Más de 4 mil personas fueron evacuadas de las costas de Mazatlán
La tormenta perdió fuerza rápidamente sobre el norte de México al degradarse a depresión tropical antes del amanecer con vientos máximos sostenidos de 55 kph (35 mph).
Con todo, ante el temor por las lluvias el estado de Durango dijo que evacuaba a 200 personas amenazadas por posibles derrames de la represa de Santa Elena. En Nayarit, los bomberos pidieron a los habitantes de poblaciones en torno al río Acaponera que “evacúen inmediatamente” porque el río alcanzaba niveles peligrosos.
Willa tocó tierra 80 kilómetros (50 millas) al sureste de Mazatlán, un centro turístico con hoteles de lujo de medio millón de habitantes, entre ellos muchos estadounidenses y canadienses.
Las lluvias torrenciales comenzaron por la tarde y agentes de emergencias dijeron que evacuaron a más de 4.250 personas de poblaciones costeras e instalaron 58 refugios en previsión de la tormenta. Las clases fueron suspendidas.
Mazatlán / AP
