Los habitantes de las calles Dividive y Ricaurte, aledañas al mercado municipal de Puerto La Cruz, solicitan a las autoridades que reubiquen a los comerciantes informales que colocan sus puestos regularmente en estas vías.
Desde que se inició la cuarentena por la pandemia de Covid-19, los vendedores ambulantes tienen restricciones para trabajar en la calle Venezuela, donde habitualmente lo hacían, y se mudaron a los accesos aledaños.
Sin embargo, el bullicio que generan a diario, además de la basura que dejan en el suelo y los constantes robos, acabaron con la paciencia de los vecinos del sector.
La señora Zoraida El Ghory, una de las afectadas, manifestó que ya no soportan que desde las 4:00 am se empiecen a escuchar gritos en el lugar porque se ven perturbados en horas de sueño.
“Aquí hay adultos mayores, que necesitan tranquilidad. Pero desde que esta gente se pone aquí eso se terminó. Estamos agotados de esta situación", expresó.
También comentó que, el pasado lunes 25 de enero, decidieron acercarse a la alcaldía del municipio, ubicada a unos pocos metros del lugar, pero se fueron inconformes porque no los atendió la mandataria local.
“No se niega que tengan derecho a trabajar, pero queremos que los reubiquen en la calle Venezuela, que es donde ellos deben estar y no en la Ricaurte, que es sólo una vía de acceso para los vehículos”, señaló María Andrade, otra de las perjudicadas por esta situación.
Hasta la fecha, las autoridades del municipio no han informado acerca del plan que supuestamente tenían para el mercado porteño.
Puerto La Cruz / Javier A. Guaipo
