Desde hace seis meses, los vecinos exigen la reparación de una tubería que derrama aguas blancas en la calle Tumba de Bello, ubicada entre la Fundación Mendoza y Tronconal III, en Barcelona, la cual afecta la vialidad que sirve de acceso directo al Cuerpo de Investigaciones, Científicas, Penales y Criminalísticas (Cicpc) y al popular mercado municipal.
Sin embargo, la caída de un camión el pasado miércoles y lo difícil que se convirtió su rescate debido a la socavación del asfalto, trajo como consecuencia que los vecinos tomaran la decisión de cerrar el paso para presionar a las autoridades a que tomen cartas en el asunto.
“Eso se ha denunciado, se ha enviado cartas y nadie busca maneras de reparar. Los más afectados somos los habitantes de Toquita Mejías, que tenemos que dar la vuelta para poder entrar a la residencia. Además, esas aguas blancas se unen con las aguas negras y colapsan el drenaje y cuando llueve la situación empeora”, expresó la administradora Doralis Rivas.
Según el residente Víctor López, al sitio se acercó este jueves una comisión de la Corporación de Vialidad e Infraestructura Gobernación del estado Anzoátegui (Covinea), cuyos integrantes prometieron hacer una siguiente visita para buscar soluciones a la fuga del líquido.
No obstante, López solicitó que también sea reparada la vialidad en su totalidad. Aunque tiene más de cinco años sin ser asfaltada, con el desbordamiento del agua potable el estado empeoró.
Barcelona / Elisa Gómez