Por el homicidio de un niño de 9 años, ocurrido en la comunidad indígena de Tascabaña I, en el municipio Freites de la zona centro de Anzoátegui, fue detenido un adolescente de 15 años de edad.
Voceros policiales indicaron que las investigaciones arrojaron que un quinceañero, quien presuntamente estaba con el chico, le quitó la vida al pequeño para robarle unas semillas de merey ya que había recolectado varios kilos más que él.
Al parecer, el adolescente se enfureció y empezó a pelear con el niño al que agarró por el cuello y lo estranguló. Supuestamente, al ver lo que había hecho medio enterró el cuerpo del niño bajo una mata de merey y lo tapó con unas hojas para luego irse del sitio.
Funcionarios de la Delegación Municipal del Cuerpo de Investigaciones Científicas Penales y Criminalísticas (Cicpc) Anaco detuvieron al adolescente, y continúan con las averiguaciones.
Se conoció que el cadáver del niño se encuentra en el Servicio Nacional de Medicina y Ciencias Forenses (Senamecf) de Barcelona dónde le practican la autopsia.
Sin embargo, sus familiares esperan ese resultado para determinar si hubo o no abuso sexual, ya que un pariente que prefirió omitir su nombre para proteger la identidad del niño como lo establece la Ley Orgánica de Protección para el Niño, Niña y Adolescente (Lopnna), dijo que manejan la versión que el niño fue interceptado por un joven que estaba en compañía de otros ingiriendo alcohol y que trató de abusar de él, pero como se resistió, lo mató.
El niño de 11 años era muy queridos por los integrantes de la comunidad indígena y se conoció que practicaba fútbol.
Residentes de Tascabaña I y familiares de la víctima se encuentran en la población en la espera de que entreguen el cuerpo para realizarle un homenaje.
Freites / Marinelid Marcano