Ya se ha hecho común que los abuelos madruguen para ir a los bancos los días de pago de la pensión del Instituto Venezolano de los Seguros Sociales, pero una práctica más reciente es la pernocta a las afueras de las entidades financieras.
A partir de las 9:00 de la noche un grupo de abuelos se apostó en las adyacencias del Banco de Venezuela ubicado en la avenida Municipal de Puerto La Cruz.
Entre ellos se encontraba Asdrúbal Hernández, habitante de Barrio Mariño. Armado con cartones, un paraguas y un abrigo, esperó hasta las 7:00 am para ingresar a la entidad bancaria.
“A pesar de ser uno de los primeros, igual adentro tardé dos horas y vine saliendo a las 9:30 am”, contó.
En el banco Bicentenario de la torre Pelícano también hicieron cola desde la noche anterior. Sin embargo, la organización de las filas se inició el lunes con la creación de una lista, según la pensionada Maritza Flores.
“Desde el lunes que supimos la fecha del pago, los mismos pensionados hicimos la lista y se asignaron los números. Desde anoche estamos aquí haciendo la cola, pero hay demasiada gente y aún no pasamos”, indicó la mujer a las 10:00 am.
En Barcelona la situación fue otra. En las entidades bancarias se observaron colas de “viejitos” que querían cobrar su pensión pero estaban más cortas que en oportunidades anteriores.
En Fondo Común, ubicado cerca del Ministerio de Trabajo, había más de 50 ciudadanos de la tercera edad. La mayoría de los consultados coincidió con que la fila estaba avanzando sin contratiempos.
Extorsión
Personas de la tercera edad y jubilados de Anaco denunciaron irregularidades y falta de efectivo en las entidades bancarias. Informaron además que el “personal administrativo solicita pago por entregar plástico a los clientes”.
La avenida Zulia de la capital anaquense amaneció este miércoles abarrotada de ancianos, que desde las 3:00 de la mañana comenzaron a aglomerarse afuera de las agencias financieras, con la esperanza de cobrar el beneficio gubernamental.
Sin embargo, los esfuerzos de algunos por obtener los Bs 80 mil fueron infructuosos. A las 10:00 am, las puertas de los bancos permanecían cerradas.
A las 11:40 del día, Marco Granado, un ciudadano de 68 años, se desvaneció en una de las colas. Al parecer, el señor, que sufre de problemas en las arterias, tuvo “un bajón de tensión por el calor”.
Mercedes Rendón, otra de las pensionadas, denunció extorsión por parte de “algunos trabajadores del Banco de Venezuela que exigen desde Bs 80 mil hasta Bs 150 mil en efectivo por dar tarjeta de débito sin hacer cola”.
Anzoátegui / D. Figueroa / J. Bermúdez / M. Aguilera