
El Parque Nacional Mochima, joya natural situada entre los estados Anzoátegui y Sucre, conmemora su quincuagésimo segundo aniversario consolidado como uno de los destinos ecoturísticos más importantes del país y el continente.
Desde su creación, Mochima ha sido un refugio de biodiversidad que ofrece a sus visitantes una experiencia única de conexión con la naturaleza. Sus aguas cristalinas y paisajes insulares permiten el desarrollo de actividades como el submarinismo, el avistamiento de delfines, el kayak y la observación de aves, atrayendo tanto a comunidades locales de ciudades vecinas como a turistas internacionales.
En el marco de esta celebración, Diego Reina Anduze, director del proyecto 7 Maravillas, hizo un llamado urgente a la ciudadanía para ejercer un turismo consciente. "La belleza de Mochima es un regalo, pero su conservación es una responsabilidad compartida. Es vital reforzar el compromiso con el cuidado de nuestro fondo marino, evitando arrojar desechos sólidos y respetando cada forma de vida en el ecosistema", señaló Reina Anduze.
Alerta ante amenazas ecológicas
A pesar del ambiente festivo, las autoridades y organizaciones ambientales aprovecharon la fecha para advertir sobre los desafíos críticos que enfrenta el parque. El principal foco de preocupación es la proliferación del coral blando invasor Unomia stolonifera.
Esta especie exótica está colonizando aceleradamente los arrecifes autóctonos, desplazando a las especies locales y alterando el equilibrio necesario para la actividad pesquera y turística. Los expertos insisten en que la efeméride debe servir para impulsar mayores esfuerzos en monitoreo científico, educación ambiental y apoyo a las comunidades que dependen de la salud de estas aguas.
Hacia un futuro sostenible
El aniversario 52 de Mochima no es solo una celebración de su pasado, sino una mirada hacia su futuro. El llamado de los promotores turísticos y entes ambientales es claro: visitar el parque bajo normas de estricto respeto ambiental.
Cuidar los residuos, evitar el contacto dañino con la fauna marina y apoyar las iniciativas de conservación locales son las acciones necesarias para garantizar que este símbolo del oriente venezolano permanezca intacto para las próximas generaciones.
El Parque Nacional Mochima se consolida como un tesoro ecológico y un pilar del turismo en el oriente de Venezuela, especialmente ahora que compite por ser una de las 7 Maravillas Naturales de América. Es un destino imperdible para quienes disfrutan del mundo submarino; en sus aguas transparentes, lugares como Playa Blanca y Playa Manare ofrecen un espectáculo de color y biodiversidad ideales para el snorkel. Para una experiencia de buceo más profunda, las islas Caracas y Cachicamo sorprenden con sus imponentes formaciones rocosas.
Puerto La Cruz / Redacción web


