Familiares del joven José Gregorio Plaza Fermín, quien murió tiroteado a las 5:30 de la tarde del 2 de julio de 2019 por funcionarios del Eje de Vehículos del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas (Cicpc), en la calle Miranda del barrio Las Delicias zona alta de Puerto La Cruz, acudieron a la redacción de El Tiempo para aclarar que su pariente fue ajusticiado por la comisión policial.
Dijeron que unos 50 funcionarios, vestidos de negro llegaron a la casa de Plaza Fermín, entraron por el techo, la parte trasera y el frente y sacaron a las personas, entre ellos tres niños de 5,6, y 8 años, además de una anciana de 85 años, tres adultos y un enfermo, a quienes se llevaron detenidos hasta la sede del Eje de Vehículos ubicada en el complejo polideportivo Simón Bolívar.
Relataron que los policías iban con la clara intención de acabar con Plaza Fermín porque no se lo llevaron con el grupo familiar sino que lo colocaron en la sala de la casa, donde comenzaron a revisarlo.
Aseguraron que cuando se los llevaron al complejo deportivo José Gregorio estaba vivo y cuando los regresaron a la casa ya estaba muerto.
El grupo familiar también denunció que durante el procedimiento los detectives cometieron hurto porque se llevaron varias cajas de licor que iban a ser utilizadas en una actividad para recaudar fondos para un familiar que tiene pendiente una intervención quirúrgica.
Destacaron que de la actuación de los detectives hay testigos, quienes escucharon y vieron como Plaza Fermín gritaba y rogaba para que no lo mataran.
En razón de lo que consideran la violación de sus derechos fundamentales, acudieron a la Fiscalía 19 a formular la denuncia, con la esperanza de que el caso sea esclarecido y se haga justicia.
Barcelona / Eleida Briceño