La Navidad, considerada por muchos como la "época más bonita del año", no solamente es aprovechada por la ciudadanía para compartir en familia, hacer hallacas, pintar la casa o comprarse ropa nueva, sino que además es un tiempo propicio para dar regalos a los más pequeños de la casa (y a los más grandes también).
Sin duda esto es lo más esperado por los niños, quienes con varios meses de anticipación preparan sus cartas al Niño Jesús con la esperanza de recibir lo que pidieron.
Anteriormente los regalos más buscados por los padres eran bicicletas, monopatines o balones de fútbol en el caso de los varones; mientras que si el obsequio era para una niña predominaban las muñecas, las casas de juguetes y las cocinas pequeñas.
No obstante, esto ha ido quedando en el pasado con el transcurrir del tiempo. ¿La razón?: Los padres ahora han preferido comprar "artículos útiles" que perduren en el tiempo y que no sólo les proporcionan diversión a sus hijos, sino que también les sirvan para aumentar sus conocimientos o hacer cualquier otro tipo de actividad.
"Yo soy partidaria de comprar cosas que valgan la pena, que sean juguetes o artículos que ellos puedan usar por mucho tiempo y que sean de mucha utilidad. Mi hija ya se ha ido acostumbrando a eso y tiene varios años pidiendo juego de marcadores o agendas personalizadas. Muchas de estas cosas después le quedan también para la escuela", comentó la técnico superior universitario (TSU), Diana Subero.
"Hace muchos años atrás sí era más accesible comprar los juguetes y no solo eso, sino que también podías adquirir lo que anhelaban en su corazón los niños porque había mejores sueldos y las cosas no eran tan caras".
Ana Sulbarán
Repostera
La ingeniero Elimar Méndez contó que también lleva varios años sin comprar juguetes para sus dos hijas de 10 y 12 años.
"Les he comprado objetos que son más útiles. A veces es más costoso comprar una tablet o una laptop (computadora portátil), pero mi pareja y yo hemos hecho el esfuerzo por darles regalos así, porque eso les sirve tanto para jugar como para hacer tareas de la escuela", señaló.
Mientras tanto, la señora Lucía Calma expresó que han sido los altos costos de los juguetes tradicionales y los equipos electrónicos lo que la ha obligado a adquirir otros artículos para dar regalos a sus hijos.
"Realmente debido a la situación no he tenido la oportunidad de comprarle bicicletas o ese tipo de regalos que son costosos, pero muy dentro de mí desearía hacerlo. Por eso creo que buscaré hoy algún morral o una caja de colores que sé que les gustan y le quedará para la escuela", manifestó.
Para hacerle frente a los altos índices inflacionarios que se vienen registrando en el país desde hace varios años, muchos padres se las han ingeniado para no romper con esta tradición de dar el regalo del Niño Jesús.
Por ejemplo, el cocinero Yeferson Pérez dijo que entre septiembre y octubre busca lo que le va a regalar a sus hijos para tratar de ahorrar algo de dinero.
"Para nadie es secreto que en diciembre por lo general todo aumenta de precio, no sólo los juguetes sino también la ropa, los zapatos y los ingredientes para hacer hallacas, por eso me programo con tiempo. Soy ese tipo de padre que hace un balance entre lo que piden y lo que necesitan. Afortunadamente los juguetes que prefieren los niños actualmente tienden a ser electrónicos y suelen ser más funcionales por largo tiempo", comentó.
Otra que adquirió los regalos en octubre fue la joven madre Alejandra Madrid, quien señaló que esa es la mejor estrategia para abaratar costos.
"No se puede negar que ahorita los precios no son nada accesibles para una persona que solo posee un trabajo y gane un sueldo mínimo. Pero si uno se organiza y busca las maneras de generar otro ingreso se pueden comprar al menos muñecos", apuntó.
Una alternativa que también ha ido ganando fuerza en los últimos años es comprar a través de plataformas digitales que no sólo ofrecen juguetes nuevos sino también usados.
Luis Macho, quien labora en un taller de confección de ropa, expresó que en días recientes logró comprar una bicicleta "de segunda mano" en 30 dólares y con eso aseguró el Niño Jesús de su hijo de 7 años de edad.
"Yo creo que es mejor así porque la bicicleta está en buen estado, sólo la limpiaré un poco y se la daré de regalo. Esto es una opción porque una bicicleta nueva no baja de 70 dólares y ahorita no se puede estar gastando tanto dinero", acotó.
En un recorrido hecho por el equipo de El Tiempo en varios establecimientos comerciales de Puerto La Cruz y Barcelona se pudo constatar que los precios de los juguetes tradicionales de la época navideña no son accesibles para muchos habitantes del estado.
Y es que los costos de las bicicletas oscilan entre $70 y $120, los monopatines entre $10 y $20, los balones de fútbol y de básquet entre $8 y $20 y los populares camiones de construcción tienen un precio promedio de 20 dólares.
En el caso de los juguetes para niñas, las barbie -una de las más buscadas históricamente- se consiguen entre $25 y $50, dependiendo de la cantidad de accesorios que posea, los juegos de cocina varían entre $8 y $20 los más sencillos y los coches oscilan entre 8 y 15 dólares.
Si estos no lucen accesibles, los precios de las casas grandes y los toboganes de plásticos que pueden ser instalados en los patios de las casas cuestan entre 280 y 400 dólares, unas cifras que están muy lejos del alcance de muchos bolsillos en la actualidad.
Pese a todo eso, la mayoría de los consultados para este trabajo especial coincidieron en que "hay que hacer todo lo posible" por regalarle algo a los niños en temporada decembrina.
"Los precios son variados, hay baratos y también caros, por eso sigo dando regalos a mis hijos en Navidad", agregó el señor Aronsi López.
Puerto La Cruz / Jesús Bermúdez Pino
