En una ceremonia conmovedora, caracterizada por la fe y la tradición, la Virgen de El Valle, Patrona del Oriente de Venezuela, fue ascendida a su principal camarín el 8 de diciembre, concluyendo así una de las festividades marianas más significativas del país.
La eucaristía comenzó a las 6:00 de la tarde, marcada por el sonido de las campanas y la asistencia de numerosos devotos. La ceremonia fue liderada por monseñor Mariano Parra, arzobispo de la Arquidiócesis de Coro, quien en su sermón exhortó a los fieles a seguir el ejemplo de fe y confianza en Dios de la Virgen María.
La imagen de la virgen se destacó con un vestido diseñado exclusivamente por el venezolano Carlos Ferrara, inspirado en la belleza natural y decorado con cristales de Swarovski. Este diseño, una verdadera pieza de arte, rinde tributo a la Patrona de la región oriental.
Después de la celebración eucarística, la imagen de la Virgen de El Valle fue trasladada a la terraza de la basílica, donde los devotos la recibieron con gran fervor. La imagen se mantendrá en la nave central hasta el 1ero de septiembre para impartir bendiciones a todos los creyentes.
"La Virgen de El Valle es un símbolo de esperanza y unión para nuestro pueblo", expresó monseñor Parra. "Su mensaje es claro: confiemos en Dios y sigamos adelante, a pesar de las dificultades".
La ascensión de la Virgen de El Valle a su camarín congrega anualmente a miles de fieles. Esta festividad refuerza la profunda devoción de los neoespartanos y venezolanos hacia la Virgen María y su mediación ante Dios.
Nueva Esparta / Mario Guillén Montero