“Dije que iba a haber paz y hay paz (…) Garantizaremos la paz y la soberanía nacional”, dijo el jefe de Estado, Nicolás Maduro, minutos después de haber sido juramentado este viernes 10 de enero como mandatario reelecto para el período 2025-2031.
A diferencia de otras oportunidades, esta vez el acto de toma de posesión presidencial no se realizó en el hemiciclo protocolar de la Asamblea Nacional (AN), sino en el Salón Elíptico del Palacio Federal Legislativo.
Bajo la cúpula del recinto, donde se encuentra el fresco de la Batalla de Carabobo de Martín Tovar y Tovar, y durante más de hora y media, Maduro se dirigió al país, en cadena de radio y televisión, para embestir contra la oposición y detallar su plan de gobierno para los próximos seis años.
Indicó que el Estado venezolano en los últimos meses había “ejercido su derecho a la legítima defensa” frente a una “conspiración pública, evidente y comunicacional, del poder de EE.UU. y sus satélites esclavos en América Latina y en el mundo”.
“Convirtieron la elección presidencial en Venezuela en una elección mundial y se la ganamos. El pueblo de Venezuela le ganó al imperialismo y a su diplomacia de engaño y no saben cómo vengarse ahora".
El gobierno saliente de EE.UU. no sabe cómo vengarse de nuestro pueblo. No pudieron con nosotros, ni nadie va a poder. Se lo digo al gobierno saliente (de EE.UU.) y a quién quiera escuchar en este mundo”, dijo Maduro, evitando mencionar al nuevo mandatario de la nación norteamericana, Donald Trump.
Otros jefes de Estado de la región si recibieron señalamientos y ataques directos por parte de Maduro, como el presidente de Argentina, Javier Milei.
“Los supremacistas se creen dueños del mundo (…) Creyeron que viniéndose todos encima de Venezuela el pueblo se iba a acobardar. No entendieron. La extrema derecha encabezada por un nazi, sionista un sádico social llamado Javier Milei junto al imperio norteamericano, cree que le puede imponer a Venezuela un presidente. A Venezuela no le impone un presidente nadie en este mundo. No han podido ni podrán jamás”, acotó.
En un momento de su alocución, bromeo sobre los anuncios de un posible arribo al país del Edmundo González Urritia, quien ha sido señalo como el triunfador de las elecciones presidenciales del 28 de julio por parte de la oposición.
“Por allí se cayó alguien. Llegó Edmundo, recójanlo, recojan su pataruco. Estoy esperando que llegue (González Urrutia) estoy nervioso”, dijo en tono de burla.
Juramentación
A las 10: 20 am el mandatario ingresó en el Salón Elíptico. El recinto fue acondicionado para acoger a los diputados, funcionarios, delegados y representantes de 125 países, además de invitados especiales, incluyendo miembros del sector presidencial.
Maduro fue recibido por el presidente de la Asamblea Nacional (AN), Jorge Rodríguez, y el resto de los representantes de los Poderes Públicos: el Fiscal Tarek William Saab, la presidenta del Tribunal Supremo de Justicia (TSJ), Caryslia Beatriz Rodríguez y el presidente del Consejo Nacional Electoral (CNE), Elvis Amoroso.
El jefe de Estado tomó su juramento, frente a Rodríguez, con su mano sobre el ejemplar original de la Constitución Bolivariana, aprobada en 1999 y firmada por el fallecido mandatario, Hugo Chávez.
Posteriormente recibió una banda presidencial, confeccionada y bordada por ciudadanos de distintos barrios de Caracas, encabezados por el artista plástico, Omar Cruz.
“Esta es una banda presidencial hecha con las manos del pueblo. Hoy más que nunca siento el peso del compromiso. El poder que tengo y represento no me lo ha dado un presidente, ni un gobierno extranjero. A mi no me ha colocado EE.UU. ni las oligarquías de los apellidos. El poder que represento y llevo, le pertenece al pueblo”, dijo al iniciar sus discurso a las 11:04 am.
El jefe de Estado anunció que el parlamento convocará en los próximos días a una Mesa de Diálogo política nacional junto al CNE para evaluar el cronograma electoral y ponerle fecha a los comicios que se celebrarán en el país en 2025, incluyendo la AN, gobernaciones y alcaldías.
Caracas / Rodolfo Baptista