La Cuaresma en Venezuela se vive este año con un espíritu de esperanza y alegría especial, marcado por el anuncio de la próxima canonización del Beato José Gregorio Hernández (JGH), quien se convertirá en el primer santo venezolano.
Este hecho histórico ha llenado de orgullo y fervor a los fieles católicos del país, quienes desde hace décadas veneran al "Médico de los Pobres" como un símbolo de caridad y devoción.
Doily Hernández, diputado de la Asamblea Nacional (AN) por el sector religioso y director ejecutivo de la asociación Misericordiane, destacó que la Cuaresma, los 40 días previos a la Semana Santa, es un tiempo de preparación espiritual, penitencia y misericordia.
"Estos días son una oportunidad para fortalecer el alma y el cuerpo, practicando con mayor énfasis la caridad, la oración y el ayuno, tal como nos ha invitado el Papa Francisco", expresó.
Durante este período, los católicos venezolanos participan en actividades como el Vía Crucis, que recuerda las 15 estaciones que Jesucristo recorrió antes de su crucifixión y resurrección. Además, la Iglesia promueve jornadas de caridad, visitas a enfermos, personas privadas de libertad y comunidades necesitadas, siguiendo el llamado del Sumo Pontífice a llevar la esperanza más allá de las paredes del templo.
Este año, la Cuaresma tiene una connotación aún más significativa, ya que coincide con el Jubileo Ordinario iniciado el 24 de diciembre de 2024, bajo el lema "Peregrinos de la esperanza". El Papa Francisco, en su mensaje para este tiempo, ha invitado a los fieles a caminar con fe, esperanza y perseverancia, buscando un encuentro más profundo con Dios y con el prójimo.
La canonización de José Gregorio Hernández, cuyo decreto fue firmado por el Papa Francisco durante su convalecencia, es un evento esperado con gran devoción por el pueblo venezolano. "Para nosotros, José Gregorio ya era santo; lo que faltaba era la firma del decreto de canonización", afirmó Doily Hernández.
Se espera que la ceremonia de canonización se realice entre septiembre y octubre de este año en Roma, durante un consistorio ordinario y público presidido por el Papa Francisco.
Mientras los fieles se preparan para vivir una Semana Santa llena de significado, la figura de José Gregorio Hernández inspira a seguir practicando la caridad y la misericordia, valores que él encarnó durante su vida.
Nueva Esparta / Mario Guillén Montero