Este martes 17 de septiembre la hija del dirigente y preso político Américo De Grazia, María Rosa De Grazia, se dirigió al Senado de la República Italiana a través de la Comisión de Derechos Humanos para exponer el caso de detención arbitraria del que está siendo víctima el exalcalde del municipio Piar; y solicitar la intervención del Gobierno italiano ante las irregularidades del arresto.
María Rosa De Grazia solicitó al embajador de Italia en Venezuela, Giovanni Umberto De Vito, que visite a su padre en El Helicoide, centro penitenciario ubicado en Caracas, para comprobar su estado físico y constatar que siga con vida. También le solicitó hacer las diligencias necesarias para que el apresado sea trasladado a Italia.
“En agosto perdimos todo contacto con mi padre. Supimos que estaba recluido en la prisión conocida como El Helicoide, centro de tortura más grande de América Latina. ¿Qué significa estar detenido en El Helicoide? No es una simple prisión, es conocido por ser uno de los centros de detención más brutal. Las condiciones de violación a los derechos humanos son frecuentes. Denuncias de torturas y abusos. Mi padre está aislado. A pesar de que requiere tratamientos de salud urgentes. Estamos desesperados, mi abuela María De Grazia tiene casi noventa años y es fuerte y decidida, pero vive una pesadilla desde que arrestaron a su hijo. ¿Qué tenemos en los gobiernos venezolano e italiano? Señor senador, hay una política en Venezuela que involucra a varios ciudadanos italianos y requiere una intervención urgente por parte del gobierno. Quiero que la autoridad competente intervenga con determinación por la vida de mi padre”, zanjó De Grazia.
Américo De Grazia fue aprehendido hace 41 días, según recientes declaraciones del ministro de Interior, Justicia y Paz, Diosdado Cabello, por su presunta vinculación con un intento de asesinato contra la actual alcaldesa de Piar, Yulisbeth García.
“Hablo como hija de Américo De Grazia. Ciudadano italiano y preso político del régimen de Nicolás Maduro en Venezuela (…). Mi padre lleva cuarenta días detenido. Sin juicio. Sin derechos y sin que su familia pueda recibir información cierta sobre su estado de salud o su condición médica, condición que no es exclusiva de nuestra familia. Llamo la atención sobre la violación sistemática de los derechos humanos en Venezuela. Donde muchos otros ciudadanos, entre ellos muchos italianos, son víctimas de persecución política”, inició la exposición de De Grazia.
A finales del mes de agosto, el canciller italiano, Antonio Tajani, solicitó que se libere a todos los presos políticos con pasaporte italiano en Venezuela, haciendo referencia a la detención del exdiputado Biagio Pilieri y su hijo Jesús Pilieri.
Para entonces se contabilizaban al menos seis presos políticos con nacionalidad italiana tras el proceso electoral del 28 de julio, según el registro de medios nacionales.
“Mi padre dedicó más de 40 años a la política. Siempre por los derechos del pueblo venezolano. Mi padre no permaneció indiferente ante el sufrimiento y siempre hizo oír su voz contra la injusticia del régimen”, continúo De Grazia, quien recordó el exilio de su padre en el año 2019 tras vivir 6 meses dentro de la Embajada italiana por su actividad política (…) Decidió regresar a Venezuela. No ha dejado de luchar por la libertad y la democracia. Desafortunadamente el régimen no dio tregua. La mayoría de las actividades económicas de nuestra familia han sido confiscadas por el gobierno”, apuntó la expositora.
Asimismo De Grazia enfatizó en que el caso del líder de Guayana Libre no es aislado, por el contrario, representa “el reflejo de una crisis de miles de personas en Venezuela, en manos de un Estado que las violenta sistemáticamente”, finalizó.