martes
, 14 de mayo de 2024
El Tiempo Informando al Pueblo Oriental

Es factible venta de crudo venezolano a EE. UU. para paliar efecto de la guerra Rusia-Ucrania, según analistas

marzo 7, 2022
Medios y agencias internacionales hicieron reseñas de encuentro entre representantes de alto nivel de los gobiernos de Estados Unidos y Venezuela / Foto: bancaynegocios.com

El conflicto bélico entre Rusia y Ucrania comienza a tener repercusiones inesperadas para la geopolítica regional.

Según fuentes extraoficiales, citadas por medios y agencias internacionales, el pasado fin de semana se habría desarrollado, en Caracas, un encuentro entre representantes de alto nivel de los gobiernos de Estados Unidos y Venezuela.

El tema energético habría sido abordado como prioridad en la reunión, por ser uno de los que preocupa seriamente a varias naciones del mundo occidental.

El diario The New York Times fue uno de los primeros en referirse al acercamiento. Apuntó que el propósito de los funcionarios norteamericanos era lograr que la administración de Nicolás Maduro vendiera petróleo a Estados Unidos, a cambio de marcar distancia con Rusia, su socio estratégico.

Ante una inminente crisis de combustible, la Casa Blanca habría intentado tender puentes con Maduro, abordando una agenda que incluía la situación de la refinería de Citgo y las licencias de actividad petrolera.

Aunque ni el sábado ni el domingo se dio una confirmación oficial del encuentro –que según agencias foráneas no arrojó ningún acuerdo-, diversos analistas se pronunciaron sobre el nuevo escenario que se abre para el país.

El economista Luis Oliveros considera que la posibilidad de reactivar el comercio petrolero con Estados Unidos debe ser evaluada seriamente por el gobierno de Maduro como una oportunidad ventajosa.

“El negocio para Venezuela de venderle petróleo a EE.UU. es mucho mejor que seguir enviándolo a Asia, no sólo por el costo del envío; la clave son los enormes descuentos en el precio. Vender ‘en su mercado natural’ y al precio de mercado sería una mejora financiera importante”, señaló el especialista a través de Twitter.


A su juicio, la oportunidad planteada cambiaría todo el panorama económico del país. “El petróleo venezolano es necesario, podría ser fundamental. Ojalá mejoren las relaciones. Ojalá veamos la embajada americana abierta pronto”.

“El negocio para Venezuela de venderle petróleo a EE. UU. es mucho mejor que seguir enviándolo a Asia”, señala el economista Luis Oliveros / Foto: Archivo

Suplir el mercado ruso

Venezuela, que diez años atrás contaba con una producción de 2,7 millones de barriles diarios de crudo, ya para mediados de 2020 había retrocedido drásticamente su extracción a niveles similares a los registrados en 1943, cuando se bombeaban unos 350 mil barriles por día.


En 2021 la producción comenzó a recuperarse y, según los últimos reportes extraoficiales, el país habría exportado 730 mil 930 barriles diarios durante el pasado mes de febrero. 

Sin embargo, la primera dificultad con la que tropieza la posible reactivación del comercio petrolero en medio de la actual coyuntura bélica es la limitada capacidad de producción que tiene la industria como resultado de años de desinversión y de la obsolescencia de las instalaciones y equipos.

De acuerdo con cifras de la Opep y de la firma Baker Hughes, el número de taladros activos en el país disminuyó paulatinamente en la última década. El país contaba con 83 equipos de extracción en octubre de 2013. Para 2016 se reportaban 58 taladros activos, que pasaron a ser entre 49 y 39 un año después y a 32 en 2018. 

Baker Hughes reveló que en mayo de 2020, el país sólo tenía dos plataformas de perforación operativas. Para diciembre de 2021,  un informe interno de Pdvsa reveló que había un total de 47 taladros activos en la Faja del Orinoco y 29 más en otras zonas. No obstante, la cifra real sería inferior, ya que, por un lado, no se discrimina entre los taladros de perforación y los de mantenimiento, y por el otro, estos serían propiedad de las empresas locales que prestan servicios a Pdvsa.


Esta realidad impide que el país capitalice la ventaja del aumento de la demanda y precios del crudo derivados de la guerra entre Rusia y Ucrania.

Adicionalmente, aunque la semana pasada el petróleo Brent llegó a superar la barrera de los $ 110 por barril, lo cierto es que Venezuela ha estado vendiendo su crudo con amplios descuentos para poder colocar su cesta de hidrocarburos en el mercado internacional. 

Oliveros ha reiterado que, a pesar de que el aumento de precios es algo positivo para Venezuela, se debe recalcar que son importantes esos descuentos con que vende Pdvsa, "de hasta 30 % o 40 % del precio” en un intento por vencer las dificultades para atraer compradores producto de las sanciones. Esto ha llevado a que el petróleo se ofrezca a cifras por debajo de los $60.

Francisco J. Monaldi, economista y profesor del Baker Institute en Estados Unidos, ve con cautela la capacidad del país de capitalizar la demanda energética surgida a raíz de la guerra, una situación que ha cerrado la llave al suministro de hidrocarburos provenientes de Rusia.

Monaldi advirtió que Venezuela produce actualmente entre 700 y 800 mil barriles de petróleo al día, mientras que Rusia generaba casi 11 millones, de los cuales exportaba casi 7 millones de barriles por día. “Venezuela, en el corto plazo, no puede llegar ni a 1 millón de barriles por día sosteniblemente”, señaló el experto.

“Sin embargo, el hecho de que la producción de Venezuela no tenga mayor impacto en el mercado mundial -aun levantándose las sanciones-, no significa que no pueda beneficiar puntualmente a Estados Unidos”, aclaró.

De esta forma, si Estados Unidos deja de importar petróleo de Rusia -lo que el año pasado significaban  550 mil barriles por día- , el crudo venezolano sí podría suplir parte del nicho comercial. “Después de todo, los rusos tomaron buena parte del mercado que había dejado Venezuela en las refinerías del Golfo de México, donde Venezuela exportaba un monto muy similar al que en 2021 vendieron los rusos”, agregó.

Oliveros es de la misma opinión. “Estados Unidos no está esperando que Venezuela coloque en el mercado toda la producción rusa (eso es imposible), pero que en el mediano plazo pueda venderle parte (o toda la producción) que ellos importaban de Rusia, sí es la opción. Irán también aumentaría su producción petrolera”, destacó el economista.

Luis Vicente León cree que no debe sorprender que EE.UU avance aceleradamente hacia la búsqueda de negociaciones petroleras con Irán y Venezuela / Foto: Sumarium

Más ventajas estratégicas

Por su parte, el presidente de Datanálisis, Luis Vicente León, cree que la importancia y las oportunidades para Venezuela dentro de la actual dinámica energética mundial son más de lo previsto.

A su juicio, resulta miope analizar el interés de la negociación entre Estados Unidos y Venezuela, sólo referida a la introducción inmediata de crudo.

“Es cierto que la producción petrolera venezolana está ‘enanizada’ y no superará mucho el millón de barriles, de los cuales una parte debe ser utilizada para demanda interna. Con Rusia produciendo diez veces eso, difícilmente Venezuela será un sustituto relevante inmediato. La contribución inmediata potencial de Venezuela a la crisis petrolera esta más vinculada a, en primer lugar, la capacidad de desviar exportaciones equivalentes a medio millón de barriles (la mayoría de sus exportaciones actuales que van a mercados negros) a refrescar el mercado mundial”.

En segundo, lugar, León considera que es posible incrementar 200 mil barriles diarios adicionales inmediatos, que pueden combinarse con producción actual para compensar el petróleo ruso que hoy abastece los mercados clásicos del crudo pesado venezolano, antes de las sanciones a Maduro.

En tercer lugar sostuvo que podría licenciar operaciones de empresas petroleras internacionales (actualmente en Venezuela o con disposición de regresar), para que gerencien y controlen los proyectos mixtos y puedan expandir la producción a mediano plazo y generar estabilidad de suministro futuro.

Otro elemento que amplía la importancia de Venezuela en la coyuntura, agregó León, es la opción de potenciar la participación privada en el mercado petrolero venezolano y “revertir el proceso acelerado de desoccidentalización, que hoy se ve claramente peligroso e inadecuado para la estabilidad de suministro de USA y Europa”.

 Con la operatividad de sus taladros comprometida, Venezuela ha visto disminuida su capacidad de extracción de crudo / Foto: Tal Cual

De cualquier modo, dentro del tablero estratégico de un eventual acercamiento Venezuela-Estados Unidos resulta imposible soslayar el elemento político-ideológico, algo que, con cierto pragmatismo, la administración de Joe Biden parece haber dejado en segundo plano.

“No hay que ser demasiado perspicaz para entender que ninguna variable política de interés latino en Estados Unidos (concentrado en Florida) va a ser más importante que el potencial costo político de una desbandada de precios de la gasolina (…) No debe ser ninguna sorpresa que Estados Unidos avance aceleradamente hacia la búsqueda de negociaciones petroleras puntuales con países que hasta hace poco eran impensables: Irán y Venezuela, pero que son importantísimos en términos del éxito de la cruzada por la estabilización de la gasolina”, recalcó León.

En este momento, la pelota está en la cancha del gobierno venezolano. Lo cierto es que las exigencias que haga la gestión de Maduro ante los planteamientos de la Casa Blanca podrían abrir o no el espacio para una renovada ronda de diálogo entre ambas naciones. 

Caracas / Rodolfo Baptista

 ET 

 ÚLTIMAS NOTICIAS

 ET 

 LAS MÁS VISTAS

El Tiempo crossmenu linkedin facebook pinterest youtube rss twitter instagram facebook-blank rss-blank linkedin-blank pinterest youtube twitter instagram