LeBron James volvió a intercambiar pases con Dwyane Wade por última ocasión. También volvió a recibir pases de Kyrie Irving. Y luego de encestar un triple casi al término del partido, clavó la mirada en Joel Embiid para enviar un mensaje sin decir una sola palabra.
Sin duda este partido fue importante para James y para su equipo.
El equipo Lebron, que estuvo abajo por 20 puntos en la segunda mitad, finalmente entró en ritmo y remontó para vencer al Equipo Giannis el domingo 178-164 en el Juego de Estrellas de la NBA.
El Jugador Más Valioso (JMV), Kevin Durant, anotó 31 puntos para el equipo de LeBron, ese que James armó y llevó a la victoria bajo el formato en el que los capitanes eligen a los jugadores de su conjunto, por segunda temporada consecutiva.
“Entro a la cancha y me encanta competir”, dijo James en la entrevista al concluir el encuentro. “Soy un competidor sin importar de qué se trate. Estaba compitiendo para ver si podía llegar primero a esta mesa”.
No bromeaba. Volteó a ver al portavoz de la NBA Mark Broussard y le preguntó si era el primer jugador en entrar a la sala y sonrió cuando le dijeron que así fue.
“¿Ves de lo que hablo?” preguntó James.
Klay Thompson registró 20 unidades, mientras que James y Kawhi Leonard encestaron 19 cada uno por el conjunto ganador.
“Es demasiado dulce”, dijo Durant después de obtener su segundo nombramiento como Jugador Más Valioso del Juego de Estrellas, después del obtenido en 2012. “Es difícil darle un lugar porque todo es especial. Pero es increíble estar con algunos de los mejores de la historia. Y ganar el JMV frente a mi familia y amigos es algo único”.
Esfuerzo perdido
Giannis Antetokounmpo, en su primera vez como capitán, fue el máximo anotador con 38 puntos. Paul George y Khris Middleton encestaron 20 cada uno para el equipo de Giannis, que tuvo 17 puntos por parte de Stephen Curry y otros 17 de Russell Westbrook.
“El simple hecho de ser el líder de un equipo, no fue tan difícil como pensé”, explicó Antetokounmpo. “Mis compañeros, en el camerino, me alentaron a dar la cara, a tomar el partido en serio y jugar duro”.
Lo más destacado, como era de esperar, fue absurdamente bueno, una y otra vez.
Curry azotó el balón contra el suelo en la primera mitad y rebotó hasta la parte más alta del tablero.
Muy elevado para la mayoría de los humanos, pero Antetokounmpo no es como todos los humanos. El griego, con sus extremidades increíblemente largas, alcanzó el balón para una clavada que provocó que ambos bancos reaccionaran incrédulos
“Creo que logramos un gran show esta noche”, comentó Kemba Walker, el único jugador de Charlotte en el encuentro.
Charlotte / Tim Reynolds / AP