El esperado ataque del equipo Sky en la alta montaña se hizo realidad el miércoles, en que arrebató al liderazgo de la prueba a Greg Van Avermaet. Pero el heredero de la casaca amarilla no fue el tetracampeón Chris Froome sino su compañero Geraint Thomas, que se adjudicó la 11ma etapa.
El británico quedó primero con un minuto y 25 segundos de ventaja sobre Froome, quien figura segundo.
Thomas atacó en el último de los cuatro puertos de montaña que registró esta etapa breve pero durísima. En el último kilómetro pasó a Mikel Nieve, quien se había fugado, y cruzó la meta con 20 segundos de ventaja sobre Tom Dumoulin, quien llegó segundo.
Froome cruzó tercero, apenas detrás de Demoulin, que trepó al tercer lugar en la general, a 1.44 de Thomas.
Froome procura igualar el récord de cinco triunfos en el Tour que comparten Jacques Anquetil, Eddy Merckx, Bernard Hinault y Miguel Induráin.
Van Avermaet, que lucía la casaca de líder desde que su equipo BMC ganó una contra reloj en la tercera etapa, perdió contacto con el pelotón de punta promediando el tramo y llegó muy retrasado.
Si bien hubo numerosos ataques a lo largo de los 108,5 kilómetros (67 millas) de la etapa, Sky mantuvo el control de la prueba y neutralizó metódicamente a todos los fugados antes de que Thomas lanzase su ataque final a seis kilómetros de la meta.
“Esperábamos estos ataques”, dijo Thomas. “Cuando se despegan, no es nada lindo verlos alejarse, pero confiamos en nuestras fuerzas e hicimos una buena carrera”.
Thomas, quien es de Gales, empleó poco menos de tres horas y media para completar el recorrido entre Albertville y el centro de esquí de La Rosiere Espace San Bernardo.
Fue su segundo triunfo de etapa, ya que también ganó una contra reloj individual el año pasado, en que lució la casaca amarilla de líder durante cuatro etapas. No terminó la carrera porque sufrió una caída en la novena etapa.
“Lucir la casaca amarilla es siempre un gran honor”, dijo Thomas, quien ha sido uno de los gregarios más leales de Froome. Sky lo nombró co-líder del equipo, junto con Froome. De modo que será interesante ver cómo se manejan las cosas ahora que es el líder de la carrera.
La etapa concluyó con un ascenso de 17,6 kilómetros a La Rosiere. También hubo un complicado descenso desde Cormet de Roselend.
El primer candidato al título en atacar fue Alejandro Valverde, en el Coll du Pre. Luego llegó el turno de Demoulin, que se despegó durante una bajada y pedaleó junto a Valverde en el ascenso final. Valverde se quedó, pero Dumoulin no cedió y demostró que puede ser el único ciclista capaz de darle pelea a Sky.
La cima de la clasificación general cambió totalmente. El campeón del 2014 Vincenzo Nibali quedó cuarto a 2.14 de Thomas y Primoz Roglic quinto a 2.23. El colombiano Nairo Quintana trepó al noveno lugar, a 3.16, pero perdió 46 segundos respecto a Froome.
La 12da etapa del jueves puede resultar también explosiva. Será el último de tres tramos por los Alpes y consiste en 175,5 kilómetros entre el centro de esquí de Les Arcs y el tremendo ascenso a l’Alpe d´Huez.