Jhonatan José Montoya Villegas, de 37 años, no murió al hacer frente a una comisión policial en Puerto Píritu, la madrugada del jueves 2 de enero, sino que fue ajusticiado por uniformados de la Policía Municipal de Peñalver (Peñalver).
Así lo aseguraron sus familiares en la medicatura forense de Barcelona, al reclamar sus restos.
Dijeron que los uniformados lo mantenían acosado y le exigían que saliera a robar para que les diera a ellos. Indicaron que en varias oportunidades lo amenazaron con ponerlo preso si no les entregaba dinero. Presumen que, al negarse, lo mataron.
Era un chofer
Montoya Villegas era chofer de una camioneta y cargaba pasajeros desde Puerto Píritu hasta Clarines.
Comentaron que no era delincuente, aun cuando reconocieron que en una oportunidad estuvo preso por un robo, pero a su juicio eso no era motivo para que le quitaran la vida de esa manera. Agregaron que tampoco tenía un arma de fuego al momento de su fallecimiento.
Señalaron que no es la primera vez que estos funcionarios hacen este tipo de procedimientos, pues hace unos seis meses detuvieron al joven Carlos José Guaimara, a las 5:00 de la tarde, y dos horas después apareció muerto.
La autopsia reveló que murió por un derrame interno debido a la golpiza que le propinaron y luego fue que le dispararon.
La denuncia será formulada ante la Fiscalía 19 de derechos fundamentales para que revise la actuación de este cuerpo policial.
Barcelona / Eleida Briceño