Cumaná, capital del estado Sucre, amaneció en calma y más activa, aunque aún hay negocios cerrados que por miedo a las acciones de calle no abrieron, otros si levantaron su santamarias.
María Hurtado, trabajadora de un supermercado del centro de la ciudad, señaló que ayer no laboró, pero hoy fue llamada porque el local abrió sus puertas.
Jesús Andrade, empresario, dijo que abrió su negocio con precaución, y no levantó todas las santamarias.
“Yo vendo productos de primera necesidad y estoy seguro que las personas saldrán hoy a comprar por miedo a lo que pase. Si la situación se pone tensa cierro”, señaló.
El tráfico está normal y el transporte público sigue pesado pero hay más unidades en las vías que ayer.
Marielys Gamardo, empleada, señaló que pasó 40 minutos en la parada esperando un autobús. “Salí porque tenía que trabajar, pero las calles están solas”.
En algunas partes se aprecian caravanas de motorizados de funcionarios de la Guardia Nacional Bolivariana (GNB) y la policía que recorren la capital.
Por otra parte, se pudo conocer que algunas instituciones como universidades e instituciones gubernamentales están trabajando. Sin embargo la Universidad de Oriente (UDO) decidió extender la suspensión de actividades
En el caso de la Universidad Católica Santa Rosa (Ucsar) abrió sus puertas aunque trabajaron sólo el personal administrativo y docente, mientras que el Instituto Universitario de Tecnología Industrial Rodolfo Loero Arismendi, suspendió las clases por toda la semana.
En el caso de la contraloría del estado Sucre trabajaron algunos funcionarios y directores. Y en la Corporación Eléctrica Nacional (Corpoelec) y cuerpos de seguridad sí se mantienen activos.
Cumaná / Corresponsalía