Cuba prevé apagones este domingo que llegarán a afectar de forma simultánea al 48 % del país durante la tarde-noche, cuando aumenta la demanda de energía, acorde con las previsiones de la compañía estatal Unión Eléctrica (UNE).
La crisis energética en la isla, agravada desde mediados del año pasado, se refleja en apagones constantes que superan hasta las 20 horas diarias en amplias regiones del país, en ciudades importantes como Santiago de Cuba y Holguín (este). En La Habana (oeste) los cortes han oscilado entre las seis y más de diez horas en el día, que incluyen las noches y las madrugadas.
En los últimos meses se han registrado cuatro apagones nacionales, de los que la isla ha tardado días en recuperarse.
En las últimas semanas, los apagones han aumentado debido a las averías en importantes unidades generadoras de electricidad del país como Felton (Holguín), que acumulan décadas de explotación, así como falta de inversiones y de combustible y de divisas para importarlo, según el Gobierno cubano.
La UNE, adscrita al Ministerio de Energía y Minas, reportó que en la víspera se afectó el servicio las 24 horas y se mantuvo así durante la reciente madrugada.
De acuerdo con los cálculos de la entidad para el horario "pico" de esta jornada, la capacidad máxima de generación eléctrica será de 1.810 megavatios (MW) para una demanda de 3.450 MW.
Lo anterior supone un déficit (la diferencia entre oferta y demanda) de 1.640 MW y una afectación (lo que se desconecta realmente para evitar apagones desordenados) de 1.710 MW en el horario de mayor consumo. Es frecuente que los valores reales superen el pronóstico oficial.
El parte diario de la UNE refiere que siete de las 20 unidades de producción termoeléctrica (distribuidas en ocho centrales) están fuera de servicio por averías o mantenimientos. Además, 34 centrales de generación distribuida (motores) se encuentran fuera de servicio por falta de combustible (diésel y fueloil).
Las centrales termoeléctricas cubanas están obsoletas en su mayoría, padecen un déficit crónico de inversión y mantenimiento, por lo que sufren averías con frecuencia.
Expertos independientes señalan que la crisis energética responde a una infrafinanciación crónica de este sector, completamente en manos del Estado cubano desde el triunfo de la revolución en 1959. El Gobierno cubano señala, por su parte, el impacto de las sanciones estadounidenses a este renglón.
Diversos cálculos no oficiales estiman que el Gobierno necesitaría entre 8.000 y 10.000 millones de dólares para reflotar la red eléctrica cubana.
Los cortes atizan el descontento social y han estado vinculados en los últimos años a las principales protestas que se han registrado en el país, como las de julio de 2021.
La Habana / EFE