“Ahora sí es verdad que vamos a pasar hambre, perdimos toda la cosecha, nos quedamos sin nada”. Así lo expresó Juliana García, habitante del sector La Vega de la comunidad Tabera, en la zona rural del municipio Simón Bolívar.
García forma parte de un grupo de 28 parceleros que, tras las crecida del río Neverí, vio cómo más de 100 hectáreas de sus siembras fueron arrasadas por el afluente.
Sembradíos de plátano, topocho, cambur, yuca, maíz, chícharo, lechosa, caraota, ají, pimentón, pasto para el ganado, naranjas, entre otros rubros, quedaron bajo el agua.
El momento de mayor tensión lo vivieron la noche del pasado viernes, cuando el río llegó hasta la entrada de sus viviendas.
“Ustedes (equipo reporteril de El Tiempo) son los únicos que han venido a ver si estamos ahogados o vivos. Supimos que el alcalde se iba a acercar, pero hasta la fecha no hemos visto ni a una comisión de la alcaldía. Necesitamos que Protección Civil venga a fumigar porque ahora es cuando abundan las plagas”, sostuvo García.
Crédito perdido
Las tres hectáreas de Luis Francisco Campos también quedaron “ahogadas”. Aseguró que consiguió un crédito con la Corporación Agrícola de Anzoátegui (Cordagro) para sembrar alrededor de hectárea y media de maíz, pero todo se le fue al traste.
“El río tapó todo, no nos quedó nada. El año pasado se metió el río pero no dañó los sembradíos, este año se perdió todo. Yo vivo de esto, la siembra me estaba creciendo bonita”, manifestó.
El también productor Pablo Campos indicó que la apertura de la represa del Turimiquire los afectó, debido a que la crecida del río alcanzó niveles inesperados.
“El río está a casi un kilómetro de los sembradíos y llegó hasta la puerta de mi casa, conocimos que abrieron la represa para aliviar el agua, pero eso nos perjudicó”.
Recursos
En sesión extraordinaria, el Consejo Legislativo del estado Anzoátegui (Cleanz) aprobó ayer, Bs 300 millones a la Gobernación para atender a los afectados por los aguaceros en el municipio Bolívar.
El gobernador Nelson Moreno indicó que Bs 200 millones serán asignados a Covinea para atender los daños ocasionados por las lluvias y el resto será para que Protección Civil adquiera colchones y enseres para los perjudicados por las precipitaciones.
A la par de ello, serán distribuidas más de 3.000 bolsas de alimentos del Clap.
En sotillo
El director de Protección Civil (PC) en Sotillo, Jhonny Sánchez, indicó que por las lluvias caídas el fin de semana resultó afectada una casa donde habitan tres familias en el sector Molorca, mirntras que en la parte alta hubo deslizamientos de tierra, sin afectados.
José Alberto Camacho - Alejandra Maigua / Barcelona