Habitantes de Mesones y La Orquídea, que frecuentan el centro de Barcelona, manifestaron que los autobuses del transporte público los dejan cada vez más lejos de las paradas establecidas debido a las restricciones de acceso dispuestas por la cuarentena radical y el “antojo de los transportistas”.
Olivia Ortíz señaló que los buses que circulan por la avenida Fuerzas Armadas hacen la última parada “donde los alcance la cola del tránsito o en cualquier otro lado”, obligándolos a caminar distancias más largas hacia su destino y bajo el sol inclemente.
Detalló que el fin de semana, cuando se trasladó a comprar comida, los vehículos dejaban a los usuarios en el puente que conecta con el Mercado Bolivariano, donde están ubicadas las otras paradas del transporte público, pues el paso al centro de la ciudad está cerrado.
Agregó que era habitual que los autobuses los bajaran en la parada La Burra, a pocos metros de la Fuente Luminosa, o en la estación de servicio Neverí, cercana a la entrada del bulevar 5 de Julio de Barcelona, ambas con acceso fácil al centro de la ciudad, pero que ahora duran entre 5 y 10 minutos para llegar a pie.
Barcelona / Milena Pérez
