El presidente ruso Vladimir Putin aseguró el jueves que su gobierno no tiene intención de desplegar tropas ni establecer bases militares en Venezuela para apuntalar al asediado gobernante de la nación sudamericana, Nicolás Maduro.
Agregó que expertos rusos se encuentran en Venezuela sólo para brindar servicio a una compra de armas rusas por parte de Caracas.
Reunido el jueves con jefes de agencias noticiosas internacionales en San Petersburgo, Putin respondió a un tuit enviado hace unos días por el mandatario estadounidense Donald Trump, en el que dijo que Moscú informó a Washington que Rusia retiraría a su personal de Venezuela.
"No estamos instalando ninguna base ni enviando tropas ahí, jamás lo hemos hecho", declaró el mandatario ruso. "Sin embargo, hemos cumplido con nuestras obligaciones en la esfera de la cooperación militar y técnica y lo seguiremos haciendo".
Posición
El líder ruso indicó que las sanciones de Estados Unidos contra Venezuela han afectado a la gente común y advirtió a Washington en contra de utilizar la fuerza.
Rusia ha respaldado sólidamente a Maduro, mientras Estados Unidos y varias otras naciones apoyan al líder opositor Juan Guaidó y lo consideran el presidente legítimo del país, aseverando que reelección del primero fue fraudulenta.
Putin, por otra parte, advirtió que podría estar surgiendo una nueva carrera armamentista. Acusó a Estados Unidos de evitar las negociaciones para renovar un tratado de control de armas que expira en 2021.
Subrayó que a pesar de que Rusia ha indicado su intencion de dialogar para renovar el pacto, Washington se ha negado a responder.
"Hemos dicho cien veces que estamos listos para ello, pero no hay respuesta", expresó.
Pacto vigente
El acuerdo START, firmado en 2010 por el entonces presidente Barack Obama y su colega ruso Dmitry Medvedev limita a cada país a un máximo de 1.550 ojivas nucleares y a 700 misiles y bombarderos.
Putin también criticó a Estados Unidos por retirarse de otro pacto armamentista, el Tratado sobre Fuerzas Nucleares de Alcance Intermedio (INF por sus siglas en inglés) de 1987 y rechazó las acusaciones estadounidenses de que Rusia lo ha violado.
Estados Unidos considera que Rusia no lo ha respetado y ha suspendido su participación en ese acuerdo, que prohíbe todos los misiles cruceros y balísticos de alcance de entre 500 y 5.500 kilómetros (entre 310 y 3.410 millas), con lo cual el pacto expirará a finales de este año. Rusia, que niega haber incumplido con el acuerdo, hizo lo propio poco después.
San Petersburgo / AP