Ojo pelao. Así tienen que andar casi un mil grupos familiares que habitan en los tres sectores del barrio Menca de Leoni, en lìmites con las comunidades de Camino Nuevo y 29 de Marzo, en Barcelona.
¿La razón? El lugar es frecuentado por individuos que roban teléfonos celulares y bombonas a gas.
Esto lo sabe la comerciante Ligia Amaricua, nativa de Zaraza, estado Guárico, quien ha vivido 48 de sus 72 años en el sector.
La señora afirmó que no la han asaltado, pero que otros residentes no han tenido tanta suerte. “Si la gente deja una casa sola, la desvalijan ahí mismo”.
Amaricua vive en la calle Nueva, cruce con avenida Rómulo Gallegos, cerca del Albergue de Menores Entidad de Atención Profesor Antonio José Díaz.
Comentamos que anteriormente los jovencitos se fugaban del recinto,sobre todo en la víspera de las temporadas vacionales, y doña Ligia recordó que de allí se salían unos muchachos, incluso desnudos o descalzos, quienes huían rumbo al canal adyacente.
Otra vecina que no se identificó acotó que eso quedó en el pasado. La última evasión de chicos ocurrió en 2015.
El final de las calles Nueva y Las Flores limita con el canal embaulado, sobre el cual pasa un puentecito oxidado que comunica con la calle Principal del sector 3, colindante con un cauce natural.
Una cuadrilla de la Alcaldía del municipio Simón Bolívar limpió el primer canal. Uno de los obreros, Cruz Vargas (64) se desmayó porque no había desayunado.
Sus compañeros lo auxiliaron, mientras que vecinos prepararon agua con azúcar para reanimar al trabajador. Otros le dieron arepas con queso y jugo.
El supervisor de la cuadrilla, José Ignacio González mencionó que entre la segunda y tercera semana de junio sanearon unos 500 metros del canal, entre los barrios Menca de Leoni y 29 de Marzo.
El trabajador afirmó que hay ciudadanos que no colaboran, pues botan desde botellas hasta colchones en el cauce, con lo cual obstruyen la circulación de las aguas.
González añadió que unas personas rellenaron la orilla del canal para construir viviendas, con lo cual redujeron su anchura, además de dificultar el mantenimiento del cauce.
Esaestructura la hicieron para aguas de lluvia, pero unos cuantos residentes empotraron allí los tubos de desagüe de los líquidos servidos de sus viviendas.
Cerca del cauce vive, sola, el ama de casa Matilde Calderón (60), quien tiene discapacidad motora y del habla.
La señora, con la ayuda de su vecino, el boxeador Félix Rodríguez (33), relató que su único hijo, el taxista José Calderón (35), fue asesinado tres años atrás por unos sujetos que iban a robarle el carro, en la vía del Aeropuerto José Antonio Anzoàtegui.
En la calle Caribe residen el carnicero Ronald Yacua (28) y el electricista Jesús Paraguán (40), quienes indicaron que a las 5:30 de la tarde tienen que cerrar las puertas y ventanas para evitar que se metan los zancudos en sus viviendas.
Los dos indicaron que a principio de este año, cayeron torrenciales aguaceros. El canal se desbordó, el nivel del agua llegó a un metro de altura. El agua se metió en sus viviendas, dañó colchones y escaparates.
El obrero de la construcción Rafael Triana (61) mencionó que en las cercanías del canal atracaron a un hombre que cambiaba detergentes por arroz y harina precocida de maíz. Le quitaron lo poco que tenía.
Otro habitante dijo que por la orilla del cauce caminan malandros con pistolas.
El chofer jubilado Ramón Carmona (66) y su esposa, el ama de casa Gladys Rojas (60), dijeron que hay tranquilidad en su calle. La iluminación no es muy buena, pues unos bombillos prenden y otros no.
Gladys se quejó de que pasan hasta cuatro días sin agua. Los camiones de la Alcaldía de Bolívar distribuyen el líquido de forma gratuita. Y cisterneros particulares venden el tambor de 200 litros por un dólar.
Aguas servidas corren por el frente de la morada del obrero de mantenimiento retirado Ramón Parababire, en la calle Caribe.
Este septuagenario explicó que en el barrio Menca de Leoni hay cloacas, pero que colapsan porque no funciona la estación de bombeo. Este problema ocurre desde hace unos tres años.
Argumentó que sus nietos de 7, 6 y 3 años no se enferman porque tienen buenas defensas.
El ama de casa Ana de Guaregua (68) reside en la avenida Rómulo Gallegos, la cual fue pavimentada y dotada de torres con luminarias en el año 2006, en la gestión del entonces alcalde del municipio Bolívar, capitán (Ej) José Pérez Fernández.
La mujer acotó que antes los camiones recolectores de los desechos sólidos pasaban dos y tres veces al día por la vía. Ahora, los vecinos dejan las bolsas de basura en la isla, pues comenzó a fallar el servicio del aseo urbano.
En la vía queda una cancha deportiva, en cuyas paredes bajas se puede leer: Liga de Fútbol Sala Menca Sport y dile no a las drogas. Allí pernoctan, a veces, algunos indigentes.
PASAN A MILLÓN
El ama de casa Ana Guaregua afirmó que motorizados de diferentes cuerpos policiales transitan por la avenida Rómulo Gallegos de la barriada Menca de Leoni en Barcelona. La señora dijo que lo malo es que los uniformados pasan a millón. Parece que van muy apurados.
La mujer comentó que unos muchachos rompieron parte de la cerca perimetral. Además lanzaron piedras en el techo, al cual se le levantaron unas láminas por la ventolera.
El bedel Rafael Guerra (33) expresó que cuando ve a los jóvenes en ese plan, les dice que si no cuidan hoy la instalación deportiva, qué van a tener mañana.
Hurtaron piezas
En la parte posterior de la cancha queda la casa de unos primos de Guerra, quienes son mecánicos y técnicos en refrigeración. De allí, sujetos se han llevado piezas de nevera y carros para venderlas como chatarra.
En la calle Las Flores, cruce con callejón Zamora, habitan Flor Cumana (71) y su hija, la educadora Yuly Conoto (48).
Ambas manifestaron que en el sector hacen patrullaje, como una vez a la semana, oficiales de la Policía Municipal de Bolívar (Polibolívar) y de la Policìa del estado Anzoàtegui (Polianzoátegui.
LUCHAS DIARIAS
Yuly se quejó porque unos vecinos hacen fiestas, desde la noche hasta el amanecer, ponen música de salsa y reguetón, a todo volumen y casi no dejan dormir a los demás. Isabel me enamoré de ti, es una de las canciones.
Otros vecinos juegan dominó. Ninguno le para al decreto de la cuarentena social que prohíbe las reuniones, para evitar la propagación del coronavirus o Covid-19.
Barcelona / Yraida Núñez