Para Cipriano Heredia, abogado y dirigente de Voluntad Popular (VP), la justicia internacional es lenta, pero al final llega a condenar a presidentes y altos funcionarios. En el caso Venezuela, espera que la investigación promovida por el nuevo fiscal de la Corte Penal Internacional (CPI), Karim Khan, dicte una sentencia en el mediano plazo.
–¿Qué tan revolucionaria es la revolución judicial que adelanta el régimen?
–Es la perfecta revolución de la involución judicial.
–¿Es la justicia internacional tan lenta como la pintan?
–Es lenta, pero tiende a ser efectiva a la larga. Muchos creyeron que nunca los alcanzaría y al final cayeron. La lista es larga.
–¿Vislumbra alguna sentencia de la Corte Penal Internacional contra altos funcionarios del régimen?
–Vislumbro que en el corto plazo, por fin, habrá una investigación penal promovida por el nuevo fiscal Karim Khan, que puede dar lugar a una sentencia de la CPI en el mediano plazo.
–De vuelta a la democracia, ¿costará reestructurar el poder judicial?
–Hay que reestructurarlo de pies a cabeza, cueste lo que cueste. Sin Justicia no hay democracia, ni confianza, ni paz verdadera.
–¿Por dónde empezaría?
–Examinando las credenciales, decisiones y hojas de vida de los funcionarios judiciales a todo nivel. Depuraría el sistema y luego sometería todos los cargos que queden vacantes a concurso.
–¿Habrá la voluntad de un verdadero cambio?
–Tiene que haberlo. La reinstitucionalización del Estado venezolano pasa por una reforma profunda del Poder Judicial.
–¿Cuántas voluntades hay en Voluntad Popular?
–Miles. VP es un partido organizado en toda Venezuela, y tiene una militancia y una dirigencia sólida, aguerrida y constante.
–Y el movimiento “La mejor Venezuela” que usted dirige dentro del partido, ¿tiene voluntad propia?
–La Mejor Venezuela es el Departamento Programático de VP. Tenemos total autonomía en cuanto a planificación y ejecución de actividades dentro de nuestra área.
–Voluntad Popular se define como un partido de centro izquierda. ¿Tiene algo de derecha?
–VP es un partido democrático, descentralizado e inclusivo, con un pensamiento social de avanzada compatible con la libre empresa, el respeto a la propiedad privada y el mercado. Defendemos la igualdad ante la Ley y la de oportunidades. La pobreza se supera creando riqueza con el concurso de todos. El Estado debe facilitar ese proceso, además de cumplir su rol en las materias que le son propias.
–¿Tienen contacto con su líder máximo?
–Leopoldo López participa con frecuencia en las reuniones de la dirección nacional y en los encuentros federales. También mantiene contacto con las regiones. La tecnología de hoy lo permite.
–¿Cuánto pesa la voluntad de Leopoldo López?
–Lo que pesa la de cualquier líder fundador de un partido, a quien sus bases y dirigencia escucha y respeta. Pero en la discusión interna se puede diferir de él y expresarlo libremente. Todos nos nutrimos y podemos cambiar de parecer con los debates.
Oposición vs oposición
–¿La piedra de tranca de la unidad opositora?
–¿A quién o quiénes te refieres? De eso acusan a varios.
–¿Hay que votar en noviembre?
–En Venezuela se vota pero no se elige. Hay que recuperar el poder del voto como reflejo de la voluntad ciudadana y para generar cambios. Lograr condiciones electorales y garantías suficientes debe prelar la decisión de participar o no. Asumir que se va al proceso "como sea" es la peor posición. Eso estimula a que no se corrijan las graves fallas del sistema, del registro de electores y del árbitro.
–¿Cómo recuperar la esperanza en la población?
–Con mucho trabajo en las bases, con organización, con transparencia en la intención y en el acción, y con propuestas claras y factibles.
DE PERFIL
Cipriano Heredia nació en Caracas, el 11 de junio de 1968. Cursó el bachillerato en el Instituto Escuela de Caracas. En 1993 egresó como abogado de la Universidad Central de Venezuela (UCV). Posee dos Máster: uno en Economía Política Internacional y otro en Ciencias Políticas, ambos de la Universidad de Manchester, Inglaterra. Es profesor de pregrado y postgrado de la UCV, y jefe de la Cátedra de Economía Política en el pregrado de la Escuela de Derecho de la misma casa de estudios. Fue coordinador de la Comisión de Educación del municipio Baruta (1993), subsecretario del Consejo de Ministros (1993-94), asesor de la Sindicatura del municipio Chacao (1999), comisionado especial del alcalde metropolitano de Caracas (2009-2012) y diputado al Consejo Legislativo del estado Miranda (2012-2018). Actualmente es coordinador nacional del movimiento La mejor Venezuela, adscrito a Voluntad Popular, y productor de la serie Hablemos de historia Venezuela.
–¿Su balance del interinato de Juan Guaidó?
–Ha logrado muchísimo. En realidad, mucho más de lo que se le reconoce, pero en la opinión pública pesa que el objetivo superior no se ha logrado. Sigue trabajando con los aliados para alcanzarlo. El Acuerdo de Salvación Nacional marca la agenda en este momento.
–¿Se impondrá la Ley de Ciudades Comunales?
–La aprobarán violando la Constitución, con lo cual se puede esperar que las alcaldías y concejos municipales pasen a ser decorativos, y las gobernaciones y consejos legislativos se verán más disminuidos aún. La Ley crea un Estado paralelo donde se conectan directamente Ejecutivo nacional y Ciudades Comunales.
–¿Teme violencia?
–En las sociedades acorraladas y oprimidas, y más aún si hay hambre y desesperanza, eso siempre es posible. Cualquier chispa puede incendiar la pradera. Nadie lo desea, pero puede pasar.
–Ante el caos judicial, ¿hay letargo en el gremio de abogados?
–Hay voces esclarecidas que denuncian irregularidades y luchan contra ellas a diario. Pero, creo que el gremio como tal ha podido hacerse sentir más.
–¿Habrá un abogado que pueda defender al Coqui?
–Es posible que alguno sea capaz. Lo que no veo es el juicio.
–¿Ha mermado la solidaridad con los presos políticos?
–Por nuestra parte, no. Hacemos permanente presión por la liberación de todos ellos. Además, hay hermanos de lucha como Yovanny, Gilberto y Roland que están injustamente privados de libertad y que cuentan con todo nuestro apoyo.
–¿Persisten las torturas?
–Todas las versiones de quienes defienden presos políticos y logran hablar con ellos indican que esa horrible práctica se mantiene en Venezuela. Muchos de quienes han salido en libertad las han narrado también.
Demandas irreversibles
–¿Vale la pena denunciar atropellos ante los poderes públicos?
–Vale la pena sustanciar cada caso de la mejor manera posible, y a veces eso pasa por acudir a los Poderes Públicos aunque no se espere nada de ellos. Sin embargo, la justicia llegará.
–¿Para qué han servido estos poderes?
–Para crear un Estado y un Derecho paralelo e inconstitucional que sólo sirven a los intereses de quienes detentan el Poder.
–¿Dónde están los jueces honestos?
–Aún debe haber algunos. Pero cada vez son menos. O se pliegan o se van… o los van.
–¿Ha conocido usted el precio de algún juez?
–Se dicen muchas cosas. Al parecer todo depende de lo que esté en juego y las ambiciones personales del juez.
–¿Ha habido violaciones en el suministro de las vacunas contra el Covid 19?
–La Asamblea electa en 2015 aprobó fondos y llegó a un acuerdo mediante el mecanismo Covax para dotar al país de 12 millones de dosis. De manera irresponsable e inhumana eso fue bloqueado desde Miraflores y hoy en día hay un enorme déficit de vacunas. Venezuela está en la cola de América Latina en ese sentido.
–¿Hasta qué punto es legal el control social que ha ejercido el Gobierno?
–Absolutamente ilegal e inconstitucional. Ese control social que se ejerce por diversas vías es un instrumento de la estrategia de dominación que está en marcha desde hace varios años.
–A pesar del expediente, ¿se hará justicia por los atropellos de los cuerpos de seguridad del Estado?
–Más temprano que tarde se hará justicia. Los verdaderos y más altos responsables de esos atropellos aún no han sido procesados.
–¿Es legal el TSJ?
–Todos sabemos que una parte del TSJ está conformada por magistrados express, que fueron designados en diciembre de 2015, entre gallos y medianoche, sin cumplir el procedimiento constitucional previsto. Uno de ellos hasta votó por sí mismo.
–¿Y la AN?
–La electa en 2015 sigue siendo la legítima, pues no ha habido elecciones válidas para sustituir a esos diputados.
–Y el nuevo CNE ¿seguirá siendo “medianamente transparente”?
–Se necesita mucho más que el cambio de unos nombres en el CNE para lograr la transparencia requerida y que el país exige.
–¿Hay Constitución en Venezuela?
–La hay. Es la de 1999. Pero, desde el propio Poder se ha estimulado que no se respete ni se cumpla.
–Dicen que los últimos 20 años han reivindicado el Poder Judicial que existió entre 1958 y 1998…
–Sin llegar a decir que era perfecto e impoluto, sin duda era un Poder Judicial bastante respetable y mucho más transparente y efectivo que el actual.
Caracas / Jolguer Rodríguez Costa