Enero de 2025 es una fecha importante. Más allá de lo que ocurra el 10 de este mes, la oposición le dará forma a las reuniones incipientes que se han iniciado este diciembre entre la Plataforma Unitaria Democrática (PUD) y diversos sectores que adversan al gobierno de Nicolás Maduro.
Luis Augusto Romero, diputado y secretario general del partido Avanzada Progresista (AP) reveló que ya han elaborado una agenda, la cual agilizarán al comenzar el próximo año. Apunta que hay que aprovechar que el oficialismo poco a poco ha mostrado sus fisuras, entre aquellos que buscan una transición pacífica, lo que no pueden perder de vista, y quienes se oponen y prefieren la deriva autoritaria para permanecer en el poder.
Romero afirma que dentro del “madurismo hay tensiones. Hay movimientos telúricos importantes a lo interno del gobierno”.
Clama porque el Gobierno conceda la libertad plena a los presos políticos y anunció que denunciarán y pedirán una investigación en el Parlamento, por la muerte de los encarcelados bajo la custodia del Estado.
-En 2025, habrá elecciones regionales, municipales y de la AN ¿Se puede pensar que habrá mínimas garantías, después de lo del 28-J?
-El 5 de enero de 2026 debe instalarse la nueva AN. Evidentemente que, a partir del 28-J y posteriori, la ruta electoral quedó severamente averiada. El torpe e irresponsable desempeño del CNE colocó al voto en una posición crítica como herramienta de cambio. Existe una percepción en la opinión pública de que el voto no sirve para nada. Y eso, está sustentado en la crisis que se generó a partir de los resultados anunciado por el CNE el 28-J.
Sería un grave error que le permitiésemos al Gobierno concurrir a esos procesos electorales por la vía libre y rápida, sin una organización y movilización de los factores de la oposición democrática en su conjunto. Y darle paso a la abstención. Hoy día existen 100 alcaldes y 1 mil concejales de oposición que están en sus municipios, asistiendo a su trabajo. También hay una representación de la AN de la oposición democrática, de la cual formo parte. Y esos son espacios de resistencia democrática frente al avance autoritario. El Gobierno juega a lo que los sociólogos llaman la desesperanza aprendida, a que la gente diga: yo no voto más, y al cometer ese error deja el camino abierto al Gobierno para ocupar todos los espacios en los cargos de representación popular.
-¿En 2025 la lucha es por ganar el Parlamento?
-Fíjate toda la importancia de ganar la elección de la AN, el próximo año, se retomaría su función contralora. Todos sabemos de la escandalosa corrupción que ha evidenciado el Gobierno en los últimos meses y años. Nosotros, desde la bancada de la oposición democrática del Parlamento, incluso y yo mismo lo pedí, que se interpelara a los responsables del desfalco de Pdvsa para que le explicaran al país qué fue lo qué pasó allí y dónde estaba el dinero. Que en definitiva es el dinero para el aumento de los maestros, de las escuelas, de los hospitales, para el mantenimiento del sistema eléctrico.Todo eso se lo robaron y esos funcionarios corruptos y delincuentes que han debido comparecer ante el Poder Legislativo, pero lamentablemente las aplanadoras de los diputados del Gobierno lo impidieron.
Si nos organizamos y votamos, la oposición puede ganar el Poder Legislativo. La mayoría ya la tuvimos, en el 2015 y con el Parlamento bajo el control de la oposición democrática podemos ponerle la mano en el pecho al Gobierno, frenar la arremetida autoritaria, pero también denunciar y ventilar la corrupción galopante del madurismo, pero si no votamos el Gobierno impondrá una mayoría en la AN como lo hizo en 2020, cuando sectores de la oposición llamaron a la abstención.
Igualmente, en el caso de los gobernadores. Vamos a abandonar a Manuel Rosales, a Alberto Galíndez, a Sergio Ramírez y a Morel Rodríguez, porque decidimos sencillamente manifestar nuestra inconformidad y molestia absteniéndonos. Yo creo que eso es darnos un tiro en el pie. Hay que organizarse nuevamente, construir una unidad sólida en torno a los liderazgos regionales y municipales que tienen en sus comunidades el reconocimiento social.
En Avanzada Progresista estamos dispuestos a asumir retos de salir al encuentro de ese liderazgo y ofrecer nuestra tarjeta para que allí se pueda canalizar el descontento de la gente y ese afán de cambio que hay en el país. Convertirlo en energía positiva a través del voto y derrotar al Gobierno donde más le duele que es el terreno electoral. No es fácil después de lo ocurrido el 28-J, pero eso es parte del ejercicio del liderazgo.
-El proceso del 28-J aún no ha concluido. ¿Bajo qué reglas se va a competir? Aunque ya el oficialismo ha hecho una exclusión de aquellos que ha calificado de neofascistas.
-El Gobierno convocó en octubre a una serie de consultas para un paquete de leyes de reformas electorales y de la Ley de Partidos Políticos, lamentablemente eso quedó congelado. Anunciaron con mucho entusiasmo que el 12 de diciembre se aprobaría algo que llamaron Código Orgánico Electoral para regular los comicios y la reforma de la Ley de Partidos. También la adjudicación de la representación proporcional y una serie de leyes punitivas para a castigar a aquellos que incurriesen en delitos establecidos en la Ley Antiterrorismo. Nosotros no votamos esas normas.
Creo que lo primero que habría que exigir y eso, deberíamos plantearlo en conjunto todas las fuerzas de la oposición democrática es cambiar al CNE. El Gobierno debe reflexionar y llamar a todos los sectores de la oposición para un debate sincero sobre la estructuración de un nuevo ente comicial que brinde garantías para aquellos que vamos a competir. Tenemos que reclamar y protestar lo que haya que protestar, pero no abandonar la ruta electoral cuando no hay otro camino democrático, cívico y constitucional. Hay que salir a buscar los votos y la gente está descontenta con el Gobierno.
Hay una mayoría en el país que quiere cambio, pero en paz. Una que no quiere hacerse matar, que no quiere dejarse manipular por sectores extremistas desde Madrid o Washington o Bogotá que llaman a que los que estamos aquí a que nos inmolemos, mientras ellos viven un exilio dorado a costa del lucro de las instituciones del Estado que con la llamada comunidad internacional confiscaron.
Esa oposición irresponsable lo que está pidiendo es que incendiemos la casa, porque tenemos un inquilino irresponsable en Miraflores y nuevas sanciones o una invasión militar.
Motivación para votar
-La Ley Simón Bolívar, aprobada a finales de noviembre, establece penas de entre 25 y 30 años de prisión para personas que apoyen sanciones internacionales contra el país. También plantea multas de hasta 1 millón de euros o inhabilitación política de hasta 60 años. Es un instrumento altamente punitivo.
-Esa ley, y otras, tiene la intencionalidad de alguna manera detener, lo que a mi juicio es indetenible: el proceso de cambio que el país requiere. Si el Gobierno cree que con represión y terrorismo de Estado va a gobernar, pues vencerá, pero no convencerá. A usted lo pueden reprimir y castigar durante un tiempo, pero no puede reprimir y castigar a todo el mundo. Eso no será suficiente. Cuando un pueblo decide cambiar no hay fuerza que lo detenga. Esa ley tristemente llamada Simón Bolívar, es un conjunto de medidas arbitrarias, abusivas e irresponsables para castigar la disidencia en el país, porque la discrecionalidad del funcionario es amplísima. Cualquiera puede ser catalogado de fascista, porque sencillamente disiente del Gobierno o porque se denuncia un acto de corrupción, es decir, son leyes hechas a la medida de un gobierno autoritario que sabe que ya no tiene el favor de las grandes mayorías del país y que quiere quedarse en el poder indefinidamente.
Pero aún en las peores condiciones, es preferible ir a votar porque en el camino de la violencia siempre tendrá ventaja el gobierno que no tiene escrúpulos a la hora de usarla frente a los opositores que manifiestan en las calles. La vía es la movilización para demostrarle nuevamente al Gobierno que ya no es mayoría.
-Hablando de la función contralora de la AN. ¿Se sabe dónde está el dinero del fondo que alimenta el sector privado para mejorar las pensiones?
-La empresa privada no ha dejado de desembolsar el porcentaje que estableció la ley. Ahora esa es la gran pregunta: ¿Dónde está el dinero? El problema con este Gobierno es que es una caja negra. En la cuarta república, por ejemplo, la Ley de Presupuesto especificaba partida por partida para dónde iba el dinero, ahora son planteamientos gaseosos, abstractos, generalizaciones y lugares comunes. Pero no se dice a dónde se va a invertir el dinero y entre otras cosas, tampoco especifican cuáles son los ingresos del país.
En este momento no se sabe realmente cuánto dinero ingresa a Venezuela. Algunos hablan que se venden 840 mil barriles de petróleo, otros que son 900 mil y que pronto llegaremos al millón, pero el monto de ese dinero no se sabe por dónde entra o si llega al Banco Central de Venezuela o si son transacciones oscuras. El Seniat declara que han aumentado la recaudación, entonces uno se pregunta: Si aumenta la recaudación y se está procesando más crudo, ¿por qué no aumenta el salario de los empleados públicos o se aumentan las pensiones?
Por estas razones, la gente quiere el cambio, pero no violencia que ya lo transitamos. ¿cuántos muchachos perdieron la vida en la autopista del este en un ejercicio inútil de resistencia física frente a los cuerpos de represión del Estado? Fueron aupados por esa oposición que está en el exilio boyante. Mientras que otros jóvenes que protestaron aún tienen que presentarse en los tribunales. Esa oposición liquidó al movimiento estudiantil.
-Habla de motivar a la gente a votar. ¿Qué estrategia van a desarrollar para convencer a la gente de que no son unos alacranes?
-Estamos haciendo contacto con factores de la Plataforma Unitaria Democrática y con otros sectores de la oposición. Establecimos una agenda que vamos a desarrollar el próximo año. La idea es evitar que la oposición siga entrampada en ese canibalismo, porque mientras estemos atrapados en esa dinámica perversa pues no vamos a poder dar la batalla que la circunstancia nos exige. Hay que identificar cuáles son los factores de la oposición democrática que podemos hacerle un planteamiento al país. El plan es construir nuevamente músculo electoral y un referente político que se conecte con la gente.
Caracas / Ascensión Reyes R.
