Con la reactivación de los buses Corta Distancia el pasado 6 de noviembre, se empezó a registrar un considerable descenso en el número de transeúntes que cruzaban a diario por el puente internacional Simón Bolívar.
En los últimos días, el escenario ha sido distinto. En vez de seguir en caída el número de peatones, hubo un repunte. Una de las posibles causas es que ya no se les permite a las unidades entrar o salir por la aduana principal de San Antonio del Táchira con pasajeros de pie.
Además, ante las pocas paradas que hay para esta ruta binacional, se les estaba permitiendo a los conductores cargar usuarios de salida de Venezuela, a la altura de la plaza La Confraternidad. Esa posibilidad también fue cerrada.
Otro punto que pudiera estar incidiendo es la cantidad de buses de la empresa referida, que pasan a diario por el tramo binacional. Los usuarios piden a la gerencia evaluar el número de flota que hace el recorrido desde Cúcuta a San Antonio, y viceversa.
Desde el regreso de los Corta Distancia y hasta la fecha, la ciudadanía de frontera ha solicitado a la alcaldía del municipio Bolívar, mediante notas de prensa, la ampliación de las paradas, tanto en la avenida Venezuela como en otros puntos estratégicos.
La idea, han especificado los usuarios de la ruta, es tener la mayor comodidad y rapidez al momento de abordar la unidad. «En la avenida Venezuela, con sentido a Colombia, hacen falta, como mínimo, dos paradas. Igual cuando se regresa a Venezuela. En el Cicpc urge otra parada», han detallado en varias oportunidades.
Aunque La Moderna, de la ruta Rubio – Cúcuta y Bolivarianos, de la ruta San Cristóbal – Cúcuta, también prestan el servicio en San Antonio, no es suficiente, pues tienen muy pocas unidades activas hacia la nación hermana.
Táchira / La Nación