El papa Francisco volvió a pedir paz en Ucrania, donde sus poblaciones son asediadas por los ataques del ejército ruso, y también en Sri Lanka y Libia, dos países convulsionados tanto política como socialmente.
"Renuevo mi cercanía al pueblo ucraniano, cotidianamente atormentado por los brutales ataques que caen sobre la gente común", expresó el pontífice tras rezar el Ángelus desde el Palacio Apostólico este domingo.
El soberano de la Ciudad del Vaticano rezo por todas las familias, las víctimas, los heridos y los enfermos. Además, en su mensaje se unió al dolor del pueblo de Sri Lanka, que continúa sufriendo los efectos de la inestabilidad política y económica", tras las revueltas que incluyeron en las últimas horas la toma de la residencia presidencial del país.
"Junto a los obispos del país, renuevo el pedido por la paz e imploro a los que tienen autoridad que no ignoren el grito de los pobres y las necesidades de la gente", agregó el Papa sobre el país asiático.
Francisco planteó, por otro lado, su recuerdo del pueblo de Libia, de todos los que sufren a causa de graves problemas sociales y económicos" en el país africano.
En ese marco, se mostró a favor de "soluciones convincentes con ayuda de la comunidad internacional".
Ciudad del Vaticano / Redacción web