Dos niños de 5 y 6 años de edad murieron la mañana de este martes en el hospital de Cantaura, a donde fueron llevados luego de convulsionar tras comer yuca amarga en la cena.
Los infantes vivían en la Aldea Bolivariana de la capital del municipio Freites y, al parecer, se acostaron a dormir después de cenar con el tubérculo que les había regalado un vecino.
Los cadáveres fueron trasladados al Servicio Nacional de Medicina y Ciencias Forenses (Senamecf) de Barcelona para la autopsia y corroborar las causas de la muerte.
Jesús Moreno, tío de los pequeños, dijo que estos eran hermanos y los únicos hijos de su sobrina Yetzimar Moreno, quien está desconsolada por lo ocurrido.
Barcelona / Eleida Briceño