Las enfermeras Karen Peraza, Denilda Luna e Iliana Castillo del Servicio de Neonatología del Hospital Luis Razetti de Barcelona, recibieron libertad sin restricciones, durante la audiencia realizada este domingo en el Tribunal de Control Nro. 1, a cargo de la jueza Raiza Irazábal.
La Fiscal del Ministerio Público de flagrancia, Agustina González, pidió privativa de libertad acusándolas del delito de hurto calificado, según la información suministrada por el abogado defensor, Boris Figuera, quien precisó que la investigación continúa abierta, por lo que podrán ser citadas por el Ministerio Público o por el Tribunal de Control, para que esclarezcan las causas que condujeron a la detención de las profesionales de la enfermería.
Los hechos
Peraza, Luna y Castillo, recibieron una citación del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas para rendir declaraciones, a partir de una inspección al nosocomio barcelonés. Posteriormente los funcionarios policiales se dirigieron a los domicilios de las enfermeras y las detuvieron sin que mediara ninguna orden judicial, de acuerdo a lo descrito por el jurista José Santoyo.
"Insisto en que estas detenciones ilegales tienen una clara intención de amedrentar a quienes alzan su voz para denunciar la crisis hospitalaria, pues las enfermeras tienen más de 100 días exigiendo el derecho a la salud y sus reivindicaciones laborales", advirtió Santoyo.
Por su parte, la presidenta del Colegio de Enfermería del estado Anzoátegui, Zuleida Cuiba, dijo que “el gobierno nacional quiere imponer su bota, para amedrentar al gremio, que está en resistencia” y rechazó que responsabilicen al gremio de la salud, por las fallas que existen en los hospitales, como la falta de insumos y medicamentos.
Redacción / Nota de prensa
