Para nadie es un secreto que Petróleos de Venezuela (Pdvsa) vive en un estado crónico y permanente de dificultades que ha echado por tierra el progreso que en décadas pasadas logró cosechar.
La industria debe sortear los efectos de una mala gestión de recursos, las sanciones -a pesar de las perspectivas de flexibilización-, y un sin fin de situaciones que la mantienen estancada a nivel operacional.
Frente a este panorama, grupos de trabajadores han adelantado propuestas y proyectos de mejoras, que esperan consignar ante el Ejecutivo el próximo año.
A juicio de Geovanny Queva, miembro del Consejo Productivo de Trabajadores (Cptt) de PDV Marina, las estructuras de la alta gerencia de Pdvsa representan “una traba” que impide a los trabajadores de base elevar sus propuestas de recuperación para la compañía.
Indicó que más de 300 dirigentes a nivel nacional, en representación de al menos 5 mil trabajadores, están manifestando su intención de unirse al plan integral de recuperación de la empresa.
Queva aseguró que la transformación de la industria debe estar enfocada en la participación directa del trabajador.
“Nosotros debemos poner a producir a Pdvsa a su máxima capacidad. Si nosotros produjéramos 3, 4 o 5 millones de barriles, nuestros salarios serían los mejores. En esta coyuntura, no vale la pena mejorar casi de forma ficticia un salario que la inflación va a eliminar”, agregó.
En cuanto a las propuestas, una de ellas es la fabricación de válvulas que permitirán mejorar la producción y pueden ser desarrolladas en Venezuela sin la necesidad de depender de la importación.
Asimismo, para Queva es necesario enfocarse en exportar productos terminados y no continuar bajo un modelo de exportación de materia prima que no es rentable en el tiempo. Para ello es necesario optimizar y ampliar el funcionamiento de las refinerías.
“Nosotros tenemos que extraer el crudo, que es nuestra materia principal, refinar el producto en nuestras refinerías y vender el producto final. Un producto terminado es más caro y genera más ingresos para la nación”.
Advirtió que actualmente, se extrae el crudo y se pone en un barco, haciendo que “al final, el que verdaderamente gana es el que usa la materia prima y la revende a un precio superior”.
Recordó que en 2019 cuando se creó la comisión Alí Rodríguez Araque, acudieron a la refinería El Palito que tras 14 intentos de arranque no habían logrado mantenerse operativa. Sin embargo, los trabajadores del Cptt lograron en 23 días poner la refinería en funcionamiento y alcanzar la producción de 6 millones de barriles de gasolina y 600 mil barriles de gasoil.
“Los trabajadores petroleros que estamos en los muelles, remolcadores y taladros somos los que de verdad conocemos la capacidad de la industria”.
El repunte inflacionario que ha experimentado el país y que se ha agudizado en los últimos meses, producto del alza de dólar, no ha permitido que la industria petrolera ofrezca salarios acordes con la realidad del trabajador.
Es por ello por lo que los empleados de la industria están en la búsqueda de mecanismos que garanticen la evaluación constante del poder adquisitivo y la revisión de los ingresos.
“Buscamos rescatar la calidad de vida con la puesta en marcha del cambio de modelo de gestión que deseamos plantear al Ejecutivo nacional”, explicó Raúl Párica, secretario de relaciones internacionales de la Federación Unitaria de Trabajadores del Petróleo y Gas (Futpv).
“Hablamos del carácter reivindicativo social y del económico. Sino hay satisfacción del trabajador en su calidad de vida, pues se haría muy cuesta arriba recuperar la productividad de la industria”.
Párica insistió que la empresa necesita ir hacia un verdadero modelo productivo que beneficie a su vez a la parte administrativa y del recurso humano y recuperar el papel de los trabajadores petroleros como contralores de la industria.
“Estamos recorriendo el país recabando todas las propuestas de la clase trabajadora para discutir y revisar para sistematizarlas y esperar esa reunión con el Ejecutivo”.
No descartan que en las primeras semanas de 2023 sean citados por el ministro de Petróleo, Tareck El Aissami, o directamente con el presidente Nicolás Maduro para entregarle la estructura definitiva del proyecto que han estado articulando durante los últimos meses de 2022.
“El trabajo se está realizando y estamos preparados para el momento en que nos llamen para ir y presentarlo formalmente”.
Considera que la vía para recuperar la industria es la organización, la unidad y el ordenamiento de la clase trabajadora petrolera. Párica indica que Pdvsa forma parte de una cadena de producción “de una columna vertebral” y para ello se necesita que estén operativas otras industrias básicas como lo son la electricidad que también ha sido golpeada por la crisis económica y mala gestión administrativa.
“Hemos hecho una suerte de encadenamientos con los trabajadores de Guayana que son hoy en día la vanguardia de la clase trabajadora venezolana, desde el punto de vista de la recuperación de su industria, y hemos trabajado con los compañeros de Corpoelec Guayana, ya que estamos conscientes que pertenecemos a una cadena más grande”, finalizó.
Caracas /Rafael Arias
