Tom Brady comenzó la campaña anterior con un claro presentimiento de que sería la última que jugaría en Patriots de Nueva Inglaterra.
El quarterback, seis veces monarca del Super Bowl aseguró que simplemente “era el momento” de marcharse de Nueva Inglaterra e iniciar otro capítulo de su carrera con Buccaneers de Tampa Bay.
Brady abordó varios temas en una entrevista de dos horas con el presentador de la radio Howard Stern. Habló sobre su matrimonio, el entrenador de los Pats, Bill Belichick, y la decisión de dejar a Nueva Inglaterra después de un histórico ciclo de 20 años.
“Puedo decir que probablemente sabía al inicio de la temporada que sería mi último año, que nuestro tiempo estaba llegando a su fin”, señaló el quarterback de 42 años al programa de Stern para la estación de radio satelital SiriusXM.
Agregó que no le preocupa que la decisión de dejar al único equipo en el que ha jugado en la NFL afecte su legado.
El convenio
Brady firmó un contrato de dos años y 50 millones de dólares con los Bucs en la agencia libre, uniéndose al equipo con la peor marca de triunfos en la historia de la liga.
Tampa Bay no se clasifica a la postemporada desde 2007 y no gana un encuentro de playoffs desde que conquistó su único Super Bowl hace 18 años.
“Nunca me importó el legado… nunca dije cuando estaba en la escuela secundaria, ‘no puedo esperar a ver cuál es mi legado en el fútbol americano’. Quiero decir, no soy así, no es mi personalidad. ¿Entonces por qué elegiría otro lugar? Fue el momento correcto. No sé qué otra cosa decir”, comentó Brady.
“Hice todo. Logré todo lo que pude en dos décadas con una organización y un grupo increíbles. Eso nunca va a cambiar”, señaló Brady, quien ha sido galardonado tres veces como el Jugador Más Valioso de la NFL. “Y nadie podrá quitarme eso. Nadie podrá quitarnos la experiencia o los campeonatos de Super Bowl”.
Brady también se expresó sobre su relación con Belichick y el dueño de Patriots Robert Kraft, cómo fue mudar a su familia a la mansión de Derek Jeter en Tampa y su matrimonio con la supermodelo Gisele Bündchen.
Reiteró que nunca hubo una ruptura con Belichick al debatirse quién de los dos cargaba mayor responsabilidad por el éxito de Patriots. En las dos décadas de la sociedad Brady-Belickick, los Pats disputaron nueve Super Bowls y 13 juegos de campeonato de la Conferencia Americana, además de ganar 17 títulos de división.
“No puedo hacer su trabajo y él no puede hacer el mío. Entonces el hecho que pudieras decir: ¿Sería exitoso sin él, igual de exitoso? No creo que lo hubiera sido. Pero creo que es lo mismo viceversa”, explicó Brady. “Me permitió ser el mejor jugador que pudiera ser. Estoy agradecido por eso y creo que él siente lo mismo sobre mi”.
Sin resentimientos
Brady insistió en que no tiene resentimiento por el hecho de que Belichick o los Pats no hayan hecho un mayor esfuerzo para garantizar su permanencia en la franquicia durante la totalidad de su carrera.
“Pienso que él tiene mucha lealtad, y que él y yo sostuvimos muchas conversaciones acerca de que nadie ha sido jamás indispensable ni debería serlo”, refirió Brady. “Hay muchas suposiciones erróneas que se hicieron sobre nuestra relación y acerca de cómo se siente él sobre mí. Conozco genuinamente cómo se siente él sobre mí”.
“Ahora, no voy a responder a cada rumor o suposición que se hace, salvo por señalar que su responsabilidad como entrenador consiste en encontrar al mejor jugador para el equipo, no sólo en el corto plazo, sino en el largo plazo”, añadió Brady, cuatro veces elegido el Jugador Más Valioso del Super Bowl.
Brady, quien cumplirá 43 años en agosto, explicó que había entrado en “terrenos inéditos como deportista”, pues siguió jugando con un alto nivel en los años recientes.
“Yo era un deportista más viejo, y él (Belichick) comenzó a planificar para el futuro, que es su responsabilidad, y no lo culpo por eso”, comentó. “Eso es lo que él debía hacer. Es lo que todo entrenador debería hacer”.
Nueva York / Barry Wilner / AP