El ingeniero Francisco Sagasti asumió este martes la presidencia de Perú y pidió a nombre del Estado perdón a los familiares de las víctimas de las protestas, al tiempo que invocó al país a moderar su enojo para superar una crisis sin precedentes.
Sagasti, político centrista de 76 años, juró al cargo en el Congreso luego de una convulsionada semana para completar el mandato gubernamental hasta julio del 2021 y que incluirá la celebración de elecciones generales el 11 de abril.
El presidente afirmó además en su primer discurso en el Parlamento como jefe de Estado que la prioridad de su gestión será la recuperación de empleos perdidos por la crisis económica ante la pandemia del coronavirus, y que llevará adelante unos comicios presidenciales con transparencia y “sin contratiempo”.
Las restricciones para frenar el coronavirus deterioraron la economía del segundo mayor productor mundial de cobre, que este año caería un 12,5%, según proyecciones oficiales.
“En estos momentos de crisis sin precedentes (...) es fundamental, es absolutamente necesario, mantener la calma, tranquilidad y ecuanimidad, pero no confundamos esto con pasividad, conformismo o resignación”, manifestó.
Sagasti fue elegido en la víspera en el Congreso como sucesor de Manuel Merino, quien renunció el domingo en medio de las protestas que dejó dos muertos y decenas de heridos, luego de la impopular decisión de destituir hace una semana a Martín Vizcarra por denuncias de corrupción.
En su discurso, el nuevo mandatario rindió homenaje a los familiares de las víctimas de las protestas, dos de las cuales fueron invitados a presenciar la toma de mando de Sagasti.
“En nombre del Estado les pido perdón a sus familiares, a ellos y a todos los jóvenes que marcharon por defender la democracia”, dijo el presidente, que ingresó a la política hace apenas unos meses como legislador del centrista Partido Morado.
HOMENAJE A JÓVENES
La designación de Sagasti apunta a suavizar las protestas lideradas en su mayoría por jóvenes cansados de los políticos tradicionales, pero también a los mercados financieros.
El sol peruano cerró el lunes con un alza del 1,75%, su mayor subida porcentual interdiaria en siete meses, y el referente de la Bolsa de Lima saltó un 1,19%.
Sagasti señaló que otros de sus retos será garantizar la estabilidad económica y el equilibrio fiscal, en un contexto en que en Gobierno anterior puso en marcha un histórico estímulo económico con un 20% del PIB para reactivar el país, duramente golpeado debido a una larga y estricta cuarentena.
Lima / Reuters