El parlamento opositor de 2015 que encabeza Juan Guaidó exigió la entrada el país de las vacunas contra el Covid-19, así como aplicar un plan inclusivo de inmunización. Para Guaidó, resulta claro “la discriminación que tiene la dictadura”.
El dirigente opositor reiteró que la Asamblea Nacional (AN) de 2015 insistirá en el ingreso de vacunas mediante el mecanismo Covax. Por su parte, el diputado Freddy Superlano señaló que “al ritmo que va el cacareado plan de vacunación, es más posible que la pandemia termine con la vida del 70% de la población en Venezuela, que el Estado vacune al 70% de la población venezolana este mismo año”.
Hasta la fecha, han ingresado al país –según los reportes oficiales- 2 millones 730 mil dosis de vacunas. Si se toma en cuenta que se requieren dos dosis por personas, los lotes de fármacos recibidos sólo alcanzarían para inmunizar a 1 millón 365 mil venezolanos, esto es cerca de 4 % de la población.
Los diputados cuestionaron que el gobierno de Maduro condicione la aplicación de la vacuna contra el Covid-19 al registro en el Sistema Patria. Fustigaron que no haya atención prioritaria al personal de salud y a los adultos mayores.
“El régimen anuncia un plan de vacunación donde solo tienen prioridad los que tienen carnet de la patria, pero no olvidemos que los primeros en vacunarse fueron Nicolás Maduro, Cilia Flores y el entorno más cercano al tirano”, expresó la diputada Ana Salas.
El canciller de Guaidó, Julio Borges, dijo que se desconoce cuántas vacunas han llegado, y cuántas llegarán en los próximos meses. “Por si fuera poco, se desconoce el porcentaje del personal de salud inmunizado, así como los grupos priorizados”, señaló.
Para Borges, Maduro es el único responsable de la grave situación sobre el Covid- 19. “Ha mentido respecto a cifras de contagiados, fallecidos y vacunas, no preparó el sistema de salud, politizó el acuerdo de Covax y utilizó las pocas dosis que llegaron para vacunarse él, su familia y su círculo de poder”, esgrimió.
Caracas / Corresponsalía