El secretario general de la OTAN (Organización del Atlántico Norte), Jens Stoltenberg, dijo el miércoles que los medios de seguridad de la institución no han sido disminuidos por la pandemia de coronavirus, en medio de sospechas de que Rusia pudiera tratar de aprovechar el impacto de la enfermedad para sondear las defensas de la alianza militar.
La OTAN reconoció que han ocurrido casos de la enfermedad entre el personal desplegado cerca de la frontera con Rusia, además de en su operación de entrenamientos en Afganistán. Las maniobras militares han sido reducidas y el coronavirus ha obligado a la alianza de 30 países a reducir personal y reuniones en su sede en Bruselas.
Rusia, mientras tanto, ha realizado simulacros que su ministerio de defensa dice están dirigidos a examinar la preparación de sus tripas para lidiar con cualquier contagio. La semana pasada, la armada británica indicó que sus navíos habían estado siguiendo a buques miliares rusos “luego de niveles inusuales de actividad en el Canal de la Mancha y el Mar del Norte”.
“Vemos por supuesto actividades militares significativas cerca de las fronteras de la OTAN con un nuevo ejercicio en el distrito militar occidental de Rusia”, les comentó Stoltenberg a periodistas. “Hemos visto una presencia rusa significativa en el Mar del Norte”.
“Hemos realizado algunos ajustes a maniobras. Hemos cancelado algunos ejercicios, hemos ajustado otros, pero eso no mina nuestra preparación operativa. Seguimos patrullando los cielos y defendiendo nuestras fronteras y continuamos nuestras misiones y operaciones”, dijo.
Moméntum
Stoltenberg hizo estas declaraciones en vísperas de una reunión de ministros de Relaciones Exteriores de la OTAN, que se realizará por primera vez por videoconferencia, y en que estará dominada por discusiones sobre el coronavirus.
Aunque la enfermedad está afectando a todos sus países miembros y continúa causando preocupaciones de seguridad, la OTAN no tiene un papel en la primera línea contra su propagación, aparte de coordinar y apoyar las gestiones nacionales con ayuda logística, de transporte y comunicaciones.
Bruselas / AP
