Desde el inicio de su carrera, cuando inició como profesional con Marineros de Seattle en la ya extinta Venezuelan Summer League, Osmer Morales mostró gran habilidad para propinar ponches, siempre la cantidad de abanicados era mayor al número de innings que completaba cada temporada y en el torneo 2023 de la Liga Mayor de Béisbol Profesional (LMBP) se convirtió en el primer lanzador en superar los 100 guillotinados en el circuito nacional.
Ángel Conde, periodista de la LMBP, reveló que su cantidad más grande de abanicados llegó en la campaña 2016 entre Clase A y Clase A Fuerte, cuando pasó por la guillotina a 134 rivales en 116.2 innings de labor; luego en 2015 ya viendo acción en Doble A y Triple A ponchó a 121. Sin embargo, esa capacidad de ser un lanzador ponchador comenzó a bajar, sobre todo en la LVBP donde de por vida acumula 166 ponches en 208.0 entradas lanzadas.
Pero parece que en los últimos dos años el derecho pudo retomar esa capacidad dentro de la LMBP, y eso le ha permitido convertirse en un pítcher histórico del circuito veraniego que cumple su tercera contienda. Totaliza 108 retirados por la vía de los tres strikes.
“Uno como pelotero siempre tiene metas y siempre quiere alcanzar muchas cosas”, expresó el abridor de Centauros de La Guaira. “No me pasaba por la mente alcanzar los cien ponches en la liga, pero cuando supe que me faltaban cinco fue el momento en que le hice más empuje, así que estoy agradecido con Dios por ser el primero en llegar a esa cifra”.
Morales, que ha sido uno de los lanzadores más regulares dentro de la rotación mitológica junto a Guillermo Moscoso y Claudio Custodio, confesó que no era algo por lo que había trabajado, y que simplemente se ha venido dando por las actuaciones que ha logrado completar y la gran relación de ponches/boletos que ha acumulado hasta ahora, la cual es de 43/8.
“Siempre lo escucho que me dice el coach de pitcheo Wilson Álvarez. Las bases por bolas casi siempre se convierten en carreras anotadas, así que esta temporada me he enfocado en no otorgar tantos boletos. Sí estoy en cuenta de tres y dos prefiero que me den un batazo con un buen pitcheo en la zona, que regalar la base al bateador”, detalló el nativo de Villa de Cura.
Más allá de este logro, el serpentinero de 30 años de edad está teniendo una buena temporada 2022, pues luego de ocho aperturas ostenta registro de 2G-1P y efectividad de 3.48 tras permitir 13 anotaciones libres de suciedad en 33.2 capítulos lanzados, además de mostrar 1.37 de whip.
En este sentido, cree que la razón de este buen accionar ha sido su control y la manera en que ataca a los bateadores rivales. “La clave ha sido mantenerme encima del conteo, siempre lanzar el primer pitcheo en strike, gracias a Dios cuento con unos buenos pitcheos secundarios que me han ayudado con respecto a eso”, expresó.
Ahora, hay algo importante con lo que todo lanzador debe contar si desea ser catalogado como buen ponchador, y es un buen repertorio de lanzamientos. Como lo comenta él mismo, posee buenos pitcheos secundarios para salir de problemas en situaciones de apremio, pero siente que no hay uno que sea el ideal para obtener abanicados, sino que es algo que va a depender de la situación.
“Aunque la curva me ha ayudado mucho todo va a depender de qué bateador esté enfrentando”, precisó Morales. “Hay muchos bateadores que me conocen y saben que uso la curva. Ese es el caso ante los derechos, pero también ante los zurdos utilizo mucho el cambio”.
Ya obtenido el logro y siendo una meta personal, el derecho ahora sigue enfocado en ayudar en todo lo que pueda a su equipo a alcanzar la clasificación a postemporada por primera vez, y el hecho de tener a una persona de tanta experiencia como Wilson Álvarez como su coach de pitcheo será muy importante.
“Tenerlo a él (Wilson Álvarez) como coach de pitcheo ha sido y seguirá siendo clave. Nos ha ayudado a todos, a mí en lo particular, y creo que todo lo logrado dentro del pitcheo es gracias a él”, agregó.
Macuto / Redacción Web