El ministro de Seguridad Nacional de Trinidad y Tobago, Stuart Young, dijo desconocer sobre el caso de los 16 niños venezolanos que fueron deportados de su país hacia Venezuela.
Aunque dijo haber recibido el reporte de los 16 menores de edad se preguntó si alguien realmente los había visto, si se sabía quiénes eran o si había certificados de nacimiento que permitieran verificar que se trataba de menores de edad. «Yo no puse a ninguna persona en ningún bote. Conozco mis responsabilidades, y no cubren eso», agregó.
Pese a reconocer que supo de las denuncias hechas por el presidente de la Asamblea Nacional (AN), Juan Guaidó, enfatizó no saber de qué hablaba. Del mismo modo, dijo que desconocía la cantidad exacta de los niños que fueron deportados.
“Entiendo la emoción y cómo la gente trata de manipular la situación. No le corresponde a nadie cambiar la ley para que se adapte a sus sentimientos. Este gobierno siempre ha abordado la migración no nacional con un equilibrio que incluye el aspecto humanitario. No se puede acusar al gobierno de tratar temas migratorios sin un pilar humanitario», dijo.
Por otra parte, aseveró que toda persona que ingrese a ese país de forma ilegal o se le descubra en la isla sin documentos será deportado.
"Si un migrante entra a la isla de manera ilegal, inmediatamente se convierte en una persona ‘indeseable’, y deberá afrontar consecuencias judiciales", dijo el funcionario.
TC / Caracas