El influencer zuliano Manuel Alejandro Núñez, conocido en las redes sociales como Manuel Conecta sigue regalando sonrisas con sus acciones sociales y humanitarias. Esta vez, el joven, quien cuenta con un millón de seguidores en Instagram, entregó una vivienda a una familia de bajos recursos económicos en Maracaibo.
Comentó que esta donación fue posible "gracias a Dios" y a la colaboración del barbero radicado en Miami, Leopoldo Infante (Leo God Is Good), quien es una referencia por su profesión y por la actividad que desde Estados Unidos ha desarrollado para apoyar a trabajadores de esta área en su natal Venezuela y en otras partes del mundo.
Además, tuvieron apoyo del cantante Nacho, el comediante y creador de contenido Marko, así como de los beisbolistas Pablo Sandoval y Miguel Cervelli, entre otros.
"Todo surgió de manera divina. Es la cuarta casa que logró entregar, gracias a Dios, desde que empezó el proyecto hace año y medio. En tan corto lapso de tiempo no lograba concebir tener la oportunidad de hacer cosas tan grandes como esas y poder sacar a familias completas de la calle; fue un orgullo bastante grande. Quiero tener la posibilidad de seguir haciendo esto por el tiempo que a Dios le parezca pertinente y me dé salud para poder continuar", expresó Núñez.
Así, el sueño de José Gregorio, quien posee una severa discapacidad motora y visual, se hizo realidad el 9 de septiembre, un mes después de que Manuel lo conociera mientras pedía ayuda en una silla de ruedas en mal estado, frente a la Basílica de Maracaibo. Allí estaba junto a dos personas de la tercera edad: su madre y su abuelo.
El video con estas imágenes lo pueden observar a través de la cuenta oficial @manuelconecta, publicado el 9 de agosto. Al día siguiente, Núñez le regaló una silla mucho mejor, para que pudiera estar más cómodo a la hora de salir a buscar el sustento alimenticio de sus hermanitas menores.
José Gregorio, un joven de 26 años, y el resto de su familia, en pocos días iban a quedar totalmente en situación de calle. Le comentó a Manuel que residían en una casa de cuidado, pero que dentro de poco los desalojarían.
En medio de la conversación con Manuel, le expresó que su mayor sueño era tener una casa donde vivir en compañía de su mamá, su abuelo y demás familiares.
Manuel Conecta, de 23 años, hizo todo lo humanamente posible para materializar esa necesidad y así sumar otra ayuda al prójimo. Además, dijo que este es uno de los casos más fuertes que ha tenido la oportunidad de atender, debido a que la edad de José Gregorio representa juventud y mucha vida por delante. Sin embargo, la realidad es otra.
"Es casi una situación de inmovilidad. Tiene problemas en la vista, ha sufrido de apendicitis y le han pasado tantas cosas malas. Y uno que suele quejarse cuando poseemos salud. Él lo único que quería hacer todos los días, pese a su condición, era salir para buscar comida para sus hermanitas. Eso me dejo totalmente frío. Fue algo que no supe explicar desde el momento en el cual logré encarar el caso", relató.
Proyectos
Manuel Conecta quisiera tener la posibilidad de ir a Colombia antes de finalizar el año y así llevar el proyecto social y humanitario hasta el país cafetero y, quizá, también "con el favor de Dios", a un tercer país de América Latina. "Pero son cosas que están por verse. Esto es gracias a las personas que, poco a poco, me han apoyado y ayudado a hacer esto en muchos países de Latinoamérica, traspasar fronteras para explicar que la solidaridad no entiende de idioma, que es un solo idioma que se puede hablar en cualquier parte del mundo".
Puerto La Cruz / María Alejandra Lunar