El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, insistió en invitar a la oposición a continuar el diálogo en el palacio presidencial de Miraflores, al tiempo que acusó al presidente de la Asamblea Nacional (AN), Julio Borges, de ser "parte de la supremacía racial, blanca, oligárquica".
"Yo los invito para que muy pronto, esta semana, a más tardar la próxima semana vayan al Palacio de Miraflores y hagamos una reunión de trabajo y pongamos los intereses del país por encima de los intereses partidistas", dijo Maduro, que aseguró desear "acuerdos rápidos" durante un acto sobre minería en el estado Bolívar.
El líder de la Revolución Bolivariana lanzó este mensaje a la Mesa de la Unidad Democrática (MUD) después de que Borges rechazara, en nombre de la oposición, el primer llamamiento de Maduro para continuar en la sede de la presidencia el diálogo iniciado en República Dominicana.
"El no puede aceptar que un hombre como yo, mestizo, mulato como soy, nieto de africanos, nieto de indios y de blancos criollos, también, sea presidente de la República un obrero (sic). Por eso es que él me desprecia, con Maduro yo no me reúno. Y con quién te vas a reunir Julio Borges? (...) ¿Quién va a firmar el acuerdo?", afirmó Maduro.
El Gobierno y la MUD -que cuenta con mayoría opositora en el Parlamento- se reunieron el viernes y el sábado pasados en Santo Domingo con seis cancilleres de Gobiernos latinoamericanos como garantes. Los encuentros se cerraron sin acuerdo, pero con el compromiso de retomar las conversaciones el 15 de diciembre en la isla.
Caracas / EFE