El presidente argentino Mauricio Macri anunció una drástica reducción del número de ministerios y la aplicación de impuestos a las exportaciones para afrontar la crisis económica y financiera.
En un mensaje televisado, el mandatario también dijo que destinará más ayuda económica y reforzará los planes alimentarios para los argentinos que viven en la pobreza y han sido especialmente afectados por el recalentamiento de la inflación debido a una devaluación del peso de más de 50% en lo que va del año.
“Para empezar a construir el país que queremos tenemos que equilibrar nuestras cuentas, con un Estado que gaste menos de lo que ingresa”, afirmó Macri, a quien en varios momentos se le escuchó con la voz quebrada.
En las últimas semanas se recrudeció la crisis cambiaria en Argentina, lo que obligó al gobierno a revisar el acuerdo crediticio que suscribió en junio con el Fondo Monetario Internacional para que le adelanten fondos para cubrir las necesidades financieras de 2019. Ese acuerdo contempló un préstamo de 50.000 millones de dólares para hacer frente a la disparada del dólar que comenzó en mayo.
Macri, de signo conservador y en el poder desde diciembre de 2015, indicó que pedirá “a quienes tienen más capacidad para contribuir, aquellos que exportan, que su aporte sea mayor”. Reconoció que el impuesto a las ventas al exterior es “malísimo” pero acotó que es necesario porque hay una situación de “emergencia”.
El mandatario no dio más detalles al respecto, pero se espera que las retenciones a las ventas al exterior se apliquen de forma generalizada y no solo en el sector agropecuario, el que aporta más ingresos a la economía.
Por otro lado, el número de ministerios se reducirá a menos de la mitad, dijo el mandatario, sin aclarar cómo se fusionarán las distintas carteras.
Para los más pobres que reciben ayuda por cada hijo, afectados por una inflación que se estima en al menos 30% para este año, Macri anunció refuerzos en septiembre y diciembre, así como planes alimentarios más completos. Por otro lado, se intensificará el control sobre distintos precios de la canasta de alimentos.
Buenos Aires / AP