Desde hace seis años, en las calles Las Mercedes, Principal y transversales de Playa Grande, municipio Bermúdez del estado Sucre, esperan por el arreglo de la red de aguas servidas que colapsó cuando se dañó la bomba de la estación de impulsión de líquidos y después, como en cascada, se averiaron dos colectores y comenzaron a rebosar las bocas de visita. El derrame permanente de aguas putrefactas se convirtió en el pan de cada día para los habitantes de la zona.
Seis años después, en las dos calles, unas 300 familias esperan que las autoridades honren sus promesas y reparen la red, para recuperar su calidad de vida.
Odalis Díaz, vecina de la calle Principal, dijo que deben soportar a diario los malos olores y el derrame permanente de aguas negras que corren desde y frente a las casas.
Dijo que ni siquiera pueden pensar en montar un negocio en la zona, porque la putrefacción espanta a los posibles clientes.
En su caso tenían una venta de empanadas y debieron desistir debido a los malos olores y a la insalubridad.
Y es que el problema se ha ido extendiendo y los locales comerciales de la calle Principal, casi todos ventas de comida, sufren con los derrames y los hedores insoportables de los líquidos.
Luis Rojas, dueño de un abasto frente a la placita, dijo que pasan los carros volando y bañan a los clientes y lamentablemente, las autoridades locales siguen sin dar soluciones definitivas.
Se quejó de que se invierta en ornato y obras que no dejan gran cosa, mientras la población sufre por la falta de servicios públicos eficientes.
Considera que los actuales gobernantes ignoran la necesidad urgente de solucionar el problema.
María Fernández, dueña de una arepera, señaló que frente a su negocio no se puede parar nadie porque lo bañan con las aguas de cloaca.
Espera que se cumplan las promesas y arreglen la estación de bombeo. Su casa es una de las afectadas donde no bajan los sanitarios y no pueden ni bañarse en su baño.
Armando Molina, vecino de la entrada de “Luis Barbero”, dijo que todos los locales de la zona, que va desde El Totumo hasta la playa, están afectados por la insalubridad.
Pidió a las autoridades de Hidrocaribe, de la alcaldía y de la gobernación que resuelvan de una vez por todas, porque ya son seis años y no quieren seguir sufriendo con la contaminación y las incomodidades de no poder ni usar los baños.
La jefa de la UBCH Petrica Reyes, Rosa Fermín, se negó a declarar sobre el tema, pero admitió que ya se han hecho unos siete reportes a la Venapp por el problema y adicionó que en la zona hay un brote de dengue, por lo que ahora deberían acudir los servicios de Salud Ambiental a fumigar de manera urgente.
Carúpano/ Yumelys Díaz
