En una inusual demostración de urgencia, el líder de Corea del Norte, Kim Jong Un, celebró su tercera conferencia política de alto nivel en otras tantas semanas, donde alertó sobre la respuesta del país al coronavirus y de la previsión de que un tifón toque tierra en el país en la madrugada del jueves.
Durante una prolongada reunión del Politburó del gobernante Partido de los Trabajadores el martes, Kim lamentó los “defectos” y “deficiencias” no especificados en la campaña antiviral del país e instó a que se corrijan rápidamente, reportó el miércoles la Agencia Central de Noticias de Corea.
Kim también pidió minuciosos preparativos para minimizar los daños que pueda causar el tifón Bavi, que llega semanas después de que las lluvias torrenciales causasen inundaciones y daños graves en viviendas y campos, infligiendo más dolor en una economía devastada por las sanciones lideradas por Estados Unidos por su programa nuclear y de armas y por el cierre de las fronteras motivado por la pandemia.
El líder marcó tareas para el partido y los servicios públicos a todos los niveles “diciendo que evitar víctimas por el tifón y minimizar los daños en los campos de cultivo es un trabajo importante que no se puede descuidar nunca ni un momento”, apuntó la agencia noticiosa oficial norcoreana parafraseando a Kim.
Momento
El miércoles en la mañana, Bavi estaba cerca de la isla surcoreana de Jeju y estaba previsto que llegase a la corta noroeste de la Península de Corea al amanecer del jueves.
Según la agencia meteorológica de Corea del Sur, el meteoro tiene vientos máximos sostenidos de 162 kilómetros por hora (100 mph) y está previsto que sea uno de los más potentes que alcanzan la península este año.
En su editorial, el diario oficial de Pyongang Rodong Sinmun instó al país a demonstrar una “unidad resuelta” en la lucha para proteger “a la gente y a los activos del socialismo de los desastres naturales".
“Deberían participar como uno en la lucha por evitar los daños del tifón, compartiendo la conciencia de crisis con el Partido", señaló el periódico. “Deberían dirigir sus mayores esfuerzos a garantizar que no se pierden vidas”.
El aviso por tifón afecta a la mayoría del país, se pidió a los barcos de pesca que se queden en puerto, y se tomaron medidas para proteger edificios, granjas, vías de tren, minas de carbón y estaciones eléctricas, indicó la agencia noticiosa en un reporte previo.
Seúl / AP