En la zona norte de Anzoátegui, mucho antes del decreto de cuarentena radical por el Covid-19, ya se observaba el cierre de locales en los centros comerciales, bien por quiebra o porque sus propietarios migraron, pero por la pandemia se agravó la situación. Así lo señaló la presidenta estadal de la Federación de Cámaras y Asociaciones de Comercio y Producción de Venezuela Fedecámaras), Monique Loffredo.
Aunque ese gremio no cuenta con cifras actualizadas sobre el índice de caída de la actividad comercial en el estado, señaló que, aunado a la contracción económica que ya atravesaba el país desde años atrás, los impuestos municipales anclados a la criptomoneda petro y la falta de incentivos para los comerciantes han sido unas de las primeras causas del cierre de negocios.
“El decaimiento se visibiliza mucho más en los centros comerciales porque concentran varios locales. Sin embargo, no son los únicos que han sufrido este mal, lo mismo se repite en los centros de las ciudades porque la situación país volvió difícil sostener un negocio”, expresó.
El método 7+7, implementado por el gobierno nacional para permitir la apertura gradual de los establecimientos no priorizados, también ha significado una traba para los que se dedican al ramo, que, por eso, piden que se elimine.
Loffredo aseveró que los comerciantes han aprendido a convivir con las medidas de bioseguridad y, en virtud de eso, dan garantías de que abrir el comercio definitivamente no representa un riesgo para la población.
Más causas
Loffredo comentó que la pandemia no ha sido la causante del declive comercial, sino un agravante para todo lo que ya se venía experimentando desde hace años. Según dijo, el repunte de cierres de comercio empezó en 2019.
“Antes de la emergencia sanitaria, el comercio ya venía sorteando con una inflación galopante que no dejaba incrementar las ventas ni pagar servicios básicos. El acceso al combustible también era una traba para movilizar tanto los productos en el territorio nacional, como a los trabajadores de los establecimientos", aseveró.
Añadió que la facilidad con que se puede instalar un comercio informal en plena calle es otro de los factores que han incidido en el cierre de los locales, pues estos sí deben pagar tributos.
La presidenta de Fedecámaras Anzoátegui ratificó que una de las principales metas de la directiva de este gremio es reestructurar las cámaras de comercio y del sector agropecuario para reactivar las vocerías y llevar las estadísticas que han dejado de ofrecer las instituciones regionales.
Puerto La Cruz / Milena Pérez