Terrible. Así describieron la logística los asistentes al partido entre Venezuela y Ecuador, disputado la tarde de este jueves en Maturín.
Gritos, empujones e improvisación era lo que se apreciaba a las afueras del Estadio Monumental al momento del ingreso de la fanaticada.
"Mucha gente que tenía entrada se quedó afuera y nadie se hace responsable por eso. Yo estaba desde las 3:00 de la tarde y casi me quedo sin ver el juego", expresó Ada Ramírez.
Ramirez explicó que durante el ingreso no hubo ni la orientación ni la celeridad necesaria para llegar a tiempo a las gradas.
"Gente que no tenía entrada pasó como Pedro por su casa y no es justo. Mil controles y nada de organización", añadió.
Josué Gil, quien viajó desde Caracas para el partido, comentó que a pesar de que la división de las entradas por zonas se hizo para mejorar la logística, los resultados fueron "mucho peores".
"La gente no sabía qué hacer y los vivos se aprovecharon de eso. Mucha desorganización y había niños y adultos mayores también", agregó.
Luciano Márquez, quien ha asistido a todos los encuentros que se han dado en Maturín en la última temporada, aseveró que este fue "el peor".
"Mucha gente se quedó afuera y se fue. Tumbaron barandas, no revisaron. Eso fue un desastre", destacó.
Maturín / Oriana García Rivas