José “Cheo” Hurtado, quien se define como investigador, articulista y defensor de la historia de Barcelona, mostró su preocupación por que, a su parecer, no se está cumpliendo a cabalidad el tema de preservación, conservación y restauración del Casco Histórico de la ciudad.
Señaló que en este año se han caído dos viviendas, una de ellas la casa natal del licenciado Diego Bautista Urbaneja, diagonal a la alcaldía; y otra ubicada al lado del Teatro Cajigal que, supuestamente, no han recibido la debida atención.
Aseguró que en el caso de la situada en la calle Rolando, le construyeron una pared de bloques y le colocaron dos ventanas de hierro en la fachada que, al parecer, no es la manera en que lo establece la Ley de Patrimonio Cultural.
“Estamos perdiendo años de historia que hay detrás de las viejas casonas de Barcelona. De historias que aún sin contar existen y que estamos haciendo lo posible por rescatarlas y plasmarlas en papel y lápiz para que la gente las conozca. No es posible que hasta los momentos no hay un concejal, ni siquiera un miembro de la comisión de cultura del Consejo Legislativo que abra la boca para decir que se derrumbó la casa natal de Urbaneja, el firmante del Acta de la Independencia, uno de los pocos civiles que en ese momento participó en el movimiento de la revolución de Caracas”, expresó Hurtado.
El también administrador del grupo en Facebook “Barcelona, su historia y su gente” resaltó que debe convocarse al Instituto de Patrimonio Cultural (IPC) para que haga el asesoramiento técnico de cómo hacer las restauraciones.
“Exhortamos, desde el movimiento que tenemos en Facebook, a la alcaldesa y a las autoridades, a fin de que den el frente para solucionar los problemas del casco histórico barcelonés”, instó.
Barcelona / Elisa Gómez