Vendedores de pescado que laboran a orillas del río Neverí, en Barcelona, denunciaron que este se encuentra lleno de bora lo que impide que pequeñas embarcaciones puedan navegarlo.
Carlos Iribarren, quien lleva cinco meses laborando en el lugar, sostuvo que "el descuido de las autoridades del estado permitió que esta planta haya crecido en toda la superficie".
"Antes, tan pronto veían que estaba creciendo, venían y la cortaban, pero como que se les olvidó que existe porque no lo han hecho más", resaltó.
Manifestó que por esta misma situación, algunos vendedores abandonaron sus puestos y se fueron a otros sitios donde se les hace más fácil conseguir mercancía.
Hacen un llamado a las autoridades ambientales, estadales y nacionales, para que se realice la limpieza del río y además se retiren los desperdicios que se encuentran en sus orillas.
Milena Pérez / Barcelona
