Los abogados Isabelina Reyes Acosta y Robert Guillén denunciaron que los mantuvieron bajo arresto, a ella nueve días y él 12, sin haber cometido delito alguno, en reclusorios de la Policía Municipal de Bolívar (Polibolívar), en Barcelona.
Ambos afirmaron que fueron citados ante el comando de la institución, donde los dejaron detenidos.
Los juristas mencionaron que de sus casos conoce la Fiscalía II del estado Anzoátegui. Ellos solicitaron que sus expedientes sean remitidos a la Fiscalía XIX con competencia en Derechos Fundamentales.
Reyes Acosta precisó que el pasado 26 abril, oficiales de Polibolívar la detuvieron, al igual que a su esposo, el médico Karlis Blanco, cuando fue a una residencia a cobrarle el monto del arrendamiento a tres inquilinos, quienes tenían unos cinco meses morosos.
La profesional dijo que los uniformados los arrestaron por un supuesto desalojo, al parecer orquestado por una funcionaria de la Defensoría del Pueblo del estado Anzoátegui, cuyo nombre se mantiene en reserva.
Indicó que tras la aprehensión, dos oficiales apellidados Alcalá y Cabello, le revisaron la cartera, de la cual, al parecer, le sacaron 220 dólares y un pendrive. Afirmó que a ella y a su esposo también los despojaron de sus anillos de graduación.
Agresión verbal y física
El abogado Robert Guillén refirió que el pasado 24 de mayo, lo aprehendieron por presuntamente irrespetar las disposiciones de la cuarentena social, alterar el orden público y resistirse a la autoridad.
Manifestó que los municipales lo señalaron, sin razón, de participar en una fiesta que celebraban en la urbanización Camino Nuevo.
Según Guillén, el oficial Alcalá no debería realizar procedimientos policiales, pues presuntamente tiene tres expedientes en los tribunales.
Expresó que en el comando fue agredido verbal y físicamente por parte, presuntamente, del exdirector de Polibolívar, comisionado Power Cano Nieto.
Barcelona / Yraida Núñez