Un grupo de astrónomos ha descifrado el misterioso origen de las auroras boreales del planeta Júpiter, según lo publicó el viernes 9/07 la revista Science Advances.
Las auroras boreales de Júpiter, caracterizadas por sus enormes pulsaciones de rayos X, se descubrieron por primera vez hace 40 años.
Los científicos llevan mucho tiempo tratando de explicar el mecanismo que hay detrás de estas auroras, tanto así que NASA las ha calificado como "un poderoso misterio". Así lo reseñó la agencia de noticias CNN.
"Son inimaginablemente más potentes (que las de la Tierra) y mucho más complejas. Las auroras boreales de Júpiter tienen estas brillantes llamaradas que pueden tener hasta teravatios de potencia que darían energía a toda la civilización", dijo William Dunn, investigador del Laboratorio de Ciencias Espaciales Mullard del University College de Londres.
Este investigador forma parte de un equipo internacional de científicos que dicen haber resuelto este misterio de hace cuatro décadas.
El portal indicó que al combinar las observaciones y los datos de la nave espacial Juno de la NASA, lanzada en 2016, y el telescopio de rayos X de la Agencia Espacial Europea, los investigadores descubrieron que las auroras pulsantes de rayos X son causadas por las fluctuaciones del campo magnético de Júpiter.
"Probablemente la razón por la que permaneció como un misterio durante 40 años es porque no habíamos tenido esta oportunidad. No hemos tenido esta hermosa y sorprendente nave espacial Juno y también un telescopio de rayos X en órbita alrededor de la Tierra", dijo Dunn.
Procesos similares podrían producirse también en Saturno, Urano, Neptuno y, probablemente, en exoplanetas, según explicó el autor principal del estudio, Zhonghua Yao, de la Academia China de Ciencias.
Mientras en Júpiter el campo magnético se llena de iones de azufre y oxígeno que son expulsados por los volcanes de Io, en Saturno la luna Encélado lanza agua al espacio, llenando el campo magnético del planeta con iones del grupo del agua, así lo indicó DW en su página web.
El proceso observado en Júpiter guarda gran similitud con las auroras iónicas que ocurren en la Tierra, donde el ion responsable es un protón, que proviene de un átomo de hidrógeno, pero el proceso no es lo suficientemente energético como para crear rayos X.
Lo que aún no está claro es por qué líneas del campo magnético vibran periódicamente, pero podría ser el resultado de interacciones con el viento solar o de flujos de plasma de alta velocidad dentro de la magnetosfera de Júpiter.
Puerto La Cruz / Redacción web