Francisco Cervelli asegura que está completamente recuperado de su última conmoción y Jorge Alfaro dice que se siente más en forma después de que pasó el invierno trabajando en una granja y corriendo.
En la posición de cátcher, por lo menos, Marlins de Miami parece estar en buena forma de cara al torneo 2020 de Grandes Ligas.
El colombiano Alfaro, quien volverá como abridor, se reportó a los entrenamientos de primavera esta semana con casi siete kilos (15 libras) menos de peso gracias a unas vacaciones activas. Su régimen incluyó ayudar en la pequeña granja de su padre en Colombia.
La actitud de Cervelli
Cervelli firmó un contrato de un año y dos millones de dólares el mes pasado después de perderse casi todo el 2019 con una conmoción que lo limitó a 48 partidos con Piratas de Pittsburgh y Bravos de Atlanta. El veterano de 12 campañas tiene una larga historia de conmociones, pero dice que ahora está completamente saludable y espera recuperarse esta temporada. No quiere ser un mero suplente.
"Esa palabra", dijo el venezolano. "No está en mi vocabulario".
Alfaro también quiere trabajar mucho, incluso más que los 130 partidos que tuvo el año pasado. Es por esto que pasó la pretemporada mejorando su estado físico.
Ayudó a su padre a pastorear el ganado y cosechar la yuca. También acudió a una pista de atletismo, dando sprints de 100 y 200 metros.
"Fue difícil", comentó. "La primera semana sentía que me moría. Pero quiero jugar el mayor número de juegos que pueda, y mi cuerpo tiene que estar listo todos los días. Sabía que tenía que perder peso, eso le va a ayudar a mis rodillas".
Cuando Alfaro llegó al campamento, el mánager Don Mattingly notó el cambio.
"Un Alfaro más liviano", señaló Mattingly el viernes. "Está en gran forma física y a uno le encanta cuando sus jugadores regresan en gran forma".
Alfaro llegó a Marlins hace un año en el cambio que envió a J.T. Realmuto a Filis de Filadelfia.
Realmuto fue seleccionado al Juego de Estrellas por segundo año consecutivo en el 2019, pero Alfaro, con un salario más bajo, tuvo una sólida temporada, con un promedio de bateo de .262 y 18 cuadrangulares.
A sus 26 años su productividad aún puede incrementar.
"No me gusta sentirme satisfecho", indicó. "Me gusta mejorar cada año".
Una mejoría
Entre todas las posiciones, incluyendo los lanzadores, los peces se ubicaron por encima del promedio en WAR (Victorias sobre Reemplazo) sólo en el campocorto el año pasado, en una campaña en la que perdieron 105 juegos. Con la adición de Cervelli, podría estar por encima del promedio en la posición de receptor esta temporada.
"Francisco lo ha hecho antes, y creemos que aún puede rendir", señaló Mattingly.
Si Cervelli no pasa el examen en la pretemporada, Marlins tambié cuenta con Chad Wallach, quien ha disputado 40 choques detrás del plato con el equipo en los últimos tres años.
Cervelli, de 33 años, fue compañero de Derek Jeter, el actual director ejecutivo de Marlins, con Yanquis de Nueva York entre 2008 y 2014. Fue el titular de los bucaneros al iniciar la temporada por quinta campaña seguida el año pasado, sufrió una conmoción en mayo y no jugó hasta el 24 de agosto tras firmar con Bravos. Acumuló un OPS de 1.066 en 14 duelos en Atlanta.
Dada su historial de conmociones, Cervelli contempló la idea de un cambio de posición cuando estuvo fuera de acción el pasado verano, pero decidió seguir como careta por un par de citas más.
"Las otras posiciones son aburridas, explicó. "No soy un jugador de béisbol. Soy un cátcher".
Jupiter / AP