La celebración de los cumpleaños es una tradición que está bastante arraigada entre los venezolanos.
Desde los más chicos hasta los más ancianos siempre anhelan el día de la conmemoración de su nacimiento para compartir con sus familiares, amigos y personas allegadas.
Y es que en estas actividades es común degustar los populares pasapalos, tales como tequeños o bolitas de carne, cantar y bailar, así como también reventar una piñata.
Y por supuesto nunca puede faltar la canción característica de cumpleaños, que según el estilo de la familia puede variar en lo que respecta al ritmo y hasta la letra.
Pero para nadie es secreto que esta tradición también se ha venido a menos debido a los altos niveles de inflación que se viven en el país y el bajo poder adquisitivo que tienen las personas en la actualidad.
Todo esto ha provocado que muchos padres sólo les piquen una torta a sus hijos, otros han optado por hacer reuniones sólo con familiares muy cercanos para abaratar costos, mientras que hay quienes simplemente han decidido, en varias oportunidades, no hacer nada porque "la masa no está pa´ bollos".
Ahora, ¿realmente cuesta tanto preparar una fiesta de cumpleaños para un niño?
El equipo de El Tiempo realizó un recorrido por piñaterías, locales comerciales y agencias de festejo, ubicadas en el área metropolitana del estado Anzoátegui, para conocer los costos de los productos e implementos básicos para hacer una celebración modesta y se corroboró que realmente el gasto total representaría un duro golpe al bolsillo para más de uno.
Y es que sólo en la compra de una torta (grande), elemento principal de toda celebración de este tipo, se tendrían que invertir entre 20 y 40 dólares, dependiendo del sabor, la decoración y el lugar donde sea adquirida.
En el caso de la piñata, un juego esperado por todos los niños en los cumpleaños, estas varían de precio, según su composición y diseño, entre 3 y 20 dólares.
Cabe mencionar que ese es el precio sólo del artículo, que por lo general es hecho a base de cartón y papel crepe. Los juguetes y las chucherías se deben comprar aparte.
Los carros, matracas, soldados, pitos u otros muñecos regularmente son vendidos por combos que en la actualidad oscilan entre 5 y 15 dólares, de acuerdo con la calidad de los mismos.
Mientras que el precio de las chucherías es muy variado y dependerá del gusto de la persona que está organizando la fiesta o en tal caso del cumpleañero.
En el recorrido hecho por comercios se pudo constatar que el paquete de chupetas de 24 unidades oscila entre 1 y 2,5 dólares, el de caramelos (100 unidades) tienen un valor promedio de $2, el de pepitos (12 unidades) va desde $4 hasta $5,5 y el de galletas genéricas (24 unidades) se consigue en $5.
Globos
El precio promedio del paquete de globos en comercios de Puerto La Cruz es de 18 bolívares. No obstante, hay algunos colores especiales, como negro o dorado, que por lo general cuestan más. Estos se consiguen en 24 bolívares en la mayoría de los negocios.
Así como ocurre con la torta, en toda fiesta es característico ingerir refresco. La caja de seis unidades de esta bebida gaseosa, dependiendo de la marca, tiene un valor que oscila entre 6 y 7,5 dólares.
Mientras que los combos de pasapalos, que siempre han sido buscados por muchos para no tener que prepararlos, en estos momentos son ofrecidos entre $8 y $10 los de 100 unidades variadas.
No obstante, hay combos de 400 unidades que pueden costar hasta 40 o 50 dólares.
Si a todo esto se le agrega el precio de alquiler de un salón (desde $60 en adelante), el pago de un servicio de decoración (25 dólares por cada 100 globos) y un castillo inflable para el disfrute de los niños ($30 el alquiler por tres horas), entonces el presupuesto final podría variar entre 150 y 200 dólares, aproximadamente.
Este cálculo podría ser mayor si la torta es más grande, si se adquieren más pasapalos de la cantidad mínima y si hay más de 20 invitados, entre otros factores.
"Yo me senté con mi esposo a sacar cuenta la otra vez y en todo gastamos 200 dólares, y eso porque sólo invitamos 15 niños y asistieron como 10 representantes. De verdad que ahorita es un gran gasto, pero mi esposo y yo lo hicimos porque era el primer año de mi hijo", comentó el ama de casa Adriana López.
Pese a todos estos precios, la creativa Olga Sánchez, quien se dedica a prestar servicio de decoración de tortas y espacios, comentó que muchas personas siguen "haciendo todo lo que pueden" para poder comprar sus cosas y celebrar el cumpleaños de sus hijos.
"Cada semana siempre me sale uno que otro cliente pidiendo que le ayude con la decoración de su fiesta, o que le haga un topper para la torta. Yo creo que si la gente se organiza y reúne poco a poco se puede dar esos gustos que son una vez al año", manifestó.
"Cada vez me salen varios pedidos de torta y eso que ya no puedo vender una en 5 o 10 dólares como hace algunos años. Sin embargo, la gente sigue reuniendo dinero para complacer a sus hijos. También hay personas a las que he apoyado, que solo me traen los materiales y yo les hago la torta sin cobrar la mano de obra".
Carmen Palacio
Repostera de Puerto La Cruz
Si hay algo que no se puede negar es que la crisis económica que sufre el país desde hace varios años, ha impulsado a los venezolanos a ingeniárselas para rendir el dinero y no perder tradiciones como la celebración de los cumpleaños.
Es por ello que algunos han buscado alternativas para no dejar pasar por debajo de la mesa este tipo de fiesta.
Por ejemplo, quien no tiene para comprar una torta, invierte mínimo 10 dólares en materiales, busca una receta y la hace en casa.
En lo que respecta a los salones de fiesta, cuando de ahorrar se trata, cualquier sala o porche de una vivienda se convierte en el mejor espacio para compartir.
Otros se arriesgan un poco más y solicitan apoyo a alcaldías o instituciones para que les presten lugares públicos como parques o el caney de algún conjunto residencial.
Para no gastar mucho dinero unos padres omiten la piñata, mientras que otros la hacen con materiales que tengan en casa y tratan de rellenarla principalmente con caramelos que son más baratos.
Y en el caso de las bebidas, las que vienen en presentación granulada en sobres cobran fuerza cuando no hay dinero para adquirir refrescos.
"Yo creo que lo importante es buscar la manera de que nuestros hijos estén felices. La otra vez yo sólo compré un refresco para picar la torta y durante toda la fiesta repartí papelón con limón que es mucho más económico y también es sabroso", señaló la joven madre Marianny Figuera.
Puerto La Cruz / Jesús Bermúdez Pino
